La lesión renal aguda ocurre cuando, de manera repentina, los riñones no pueden filtrar los desechos de la sangre. Una vez que los riñones no pueden filtrar los desechos, pueden acumularse niveles nocivos de estos últimos. Por lo anterior, la composición química de la sangre puede desequilibrarse.
La lesión renal aguda solía llamarse insuficiencia renal aguda. Es más común en personas que están hospitalizadas, principalmente en aquellas que requieren cuidados intensivos.
La lesión renal aguda puede presentarse cuando:
- Tienes una afección que reduce el flujo sanguíneo hacia los riñones.
- Tienes daño en los riñones.
- Los conductos de drenaje de la orina de los riñones, llamados uréteres, se bloquean.
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Las afecciones que pueden reducir el flujo sanguíneo hacia los riñones y provocar una lesión renal incluyen las siguientes:
- Pérdida de demasiado líquido corporal, llamada deshidratación.
- Infección con o sin sepsis o choque séptico.
- Medicamentos como ácido acetilsalicílico, ibuprofeno o naproxeno sódico.
- Pérdida de sangre o líquido.
- Presión arterial demasiado baja por tomar medicamentos para la presión arterial.
- Ataque cardíaco.
- Insuficiencia cardíaca o enfermedad cardíaca.
- Cirrosis o insuficiencia hepática.
- Reacción alérgica grave, llamada anafilaxia.
- Quemaduras graves.
Fuente: Mayo Clinic
