Incluso los niños que mejor se portan pueden ser difíciles y desafiantes en ciertos momentos. Sin embargo, el trastorno negativista desafiante (TND) incluye un patrón frecuente y continuo de ira, irritabilidad, discusiones y desafío hacia los padres y otras figuras de autoridad. El TND también incluye ser rencoroso y buscar vengarse, un comportamiento llamado «espíritu de venganza».
Conoce más: Trastorno depresivo persistente, ¿qué es y cómo detectarlo?
Estos altibajos emocionales y de comportamiento causan serios problemas con la vida familiar, las actividades sociales, la escuela y el trabajo. Pero como madre o padre, no tienes que tratar de manejar a un niño con TND sola o solo. Su proveedor de atención médica, un profesional de la salud mental y un experto en desarrollo infantil pueden ayudar.
El tratamiento del TND involucra el aprendizaje de habilidades para ayudar a construir interacciones familiares positivas y para manejar comportamientos problemáticos. Podría ser necesario otro tratamiento, y posiblemente el uso de medicamentos, para tratar afecciones de salud mental relacionadas.
Fuente: Mayo Clinic