La queratosis pilaris es una afección inofensiva muy común en la que aparecen pequeñas protuberancias en la piel. Puede durar mucho tiempo, pero existen tratamientos que pueden ayudar.
Los síntomas de la queratosis pilaris suelen incluir:
- Piel seca y áspera.
- Pequeñas protuberancias indoloras en la piel.
- Manchas de protuberancias del mismo color que la piel.
Por lo general, aparecen manchas de pequeñas protuberancias en los brazos, los muslos o los glúteos, pero pueden aparecer en otros lugares.
Las protuberancias generalmente son del color de la piel. Entonces, pueden ser rojas si están en la piel blanca, o más oscuras en la piel morena o negra.
En ocasiones, la piel puede picar, así como mejorar en verano y empeorar en invierno.
La queratosis pilaris puede afectar a personas de cualquier edad. Si tu hijo(a) tiene un sarpullido y no estás seguro(a) de que se trate de queratosis pilaris, consulta más información con tu médico sobre los sarpullidos en bebés y niños.
¿Qué puedes hacer para ayudar?
La mayoría de las personas con queratosis pilaris la padecen durante años y, con el tiempo, puede desaparecer por sí sola.
No obstante, existen cosas que puedes llevar a cabo para ayudarte a ti o a tu niño(a) a mejorar el aspecto de la piel:
Sí
- Hidrata la piel: pregunta a tu médico qué producto es el más adecuado.
- Usa jabones y productos de baño suaves y sin perfume.
- Frota suavemente la piel con una toallita o un guante exfoliante.
- Date duchas y baños fríos o tibios.
No
- No uses jabones o productos de baño perfumados que puedan resecar la piel
- No uses exfoliantes fuertes en la piel: pueden empeorarla.
- No te bañes ni te duches con agua caliente.
- No te rasques ni te frotes la piel.
Fuente: NHS
