Uno de los síntomas más comunes de la diabetes es la boca seca o xerostomía. Esta sequedad es un síntoma común tanto en la diabetes tipo 1 como en la tipo 2. Sin embargo, no todas las personas con diabetes la padecen. También puedes experimentar boca seca si no tienes diabetes. Si manifiestas esta afección bucal y sospechas tener diabetes, debes hablar con tu médico de atención primaria.
Es importante resaltar que la boca seca no tratada puede provocar problemas de salud bucal. La saliva descompone los carbohidratos y contiene células capaces de combatir los patógenos que pueden provocar infecciones. Cuando tienes menos saliva, la glucosa y los gérmenes pueden acumularse en la boca. Esto puede provocar la acumulación de placa, que a su vez puede provocar caries.
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La sequedad bucal no controlada puede derivar en las siguientes complicaciones con el paso del tiempo:
- Gingivitis, o encías inflamadas e irritadas debido a la presencia de bacterias
- Periodontitis, o inflamación del tejido que rodea los dientes
- Aftas, o candidiasis, que es el crecimiento excesivo de hongos en la boca
- Mal aliento que persiste después de cepillarse los dientes y limpiarse excesivamente
En algunos casos graves, las glándulas salivales pueden infectarse. La sequedad bucal también puede derivar en problemas para dormir y afectar el sentido del gusto.
Fuente: Healthline
