Una buena nutrición durante el embarazo puede ayudar a mantenerte a ti y a tu bebé en desarrollo en un estado saludable. Tu necesidad de ciertos nutrientes (como hierro, yodo y ácido fólico) aumenta cuando estás embarazada.

Una dieta variada que incluya la cantidad adecuada de alimentos saludables de los 5 grupos de alimentos suele proporcionarle al cuerpo las vitaminas y minerales que necesita cada día. Sin embargo, las mujeres embarazadas pueden requerir el uso de suplementos de vitaminas o minerales durante el embarazo (como ácido fólico y vitamina D).

Consulta a tu médico antes de tomar cualquier suplemento. Es posible que recomiende hacerte un análisis de sangre o que consultes a un(a) nutriólogo(a) para revisar tu necesidad de tomar un suplemento. No debería ser necesario que tomes un suplemento de vitamina D, a menos que te hayan diagnosticado deficiencia de dicho nutriente mediante un análisis de sangre.

El aumento de peso constante durante el embarazo es normal e importante para la salud tuya y de tu bebé. Sin embargo, también es importante no ganar demasiado peso.

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Por otra parte, el aumento de peso excesivo durante el embarazo puede incrementar el riesgo de ciertos problemas de salud, como diabetes gestacional y presión arterial alta durante el embarazo. El aumento de peso excesivo también puede dificultar la pérdida de peso después del embarazo.

Por ello, durante tu embarazo, una buena estrategia es comer para saciar tu apetito y seguir controlando tu peso. Puedes hablar con tu médico de cabecera, nutriólogo(a) u obstetra para que te ayuden a controlar el peso.

Si experimentas sobrepeso, el embarazo no es el momento de empezar a hacer dieta o de intentar perder unos kilos. El aumento de peso dentro de estos rangos es crucial para favorecer el crecimiento y el desarrollo de tu bebé.

Para mantener un aumento de peso adecuado durante el embarazo, es importante que:

  • Elijas alimentos saludables de los 5 grupos de alimentos.
  • Limites los alimentos y bebidas discrecionales con alto contenido de grasas saturadas, azúcares añadidos y sal añadida (como pasteles, galletas y bebidas azucaradas).
  • Realices actividad física a lo largo del embarazo.

 

Fuente: Better Health Channel