Las vacaciones no deben tratarse siempre de ingerir comida chatarra y dedicarse únicamente a descansar. Tener unas vacaciones activas que incluyan buenas comidas puede promover la salud y la alimentación saludable en toda la familia.
Por ello, el Consejo Americano del Ejercicio sugiere:
- Mantengan las reglas de un estilo de vida saludable, pero sean flexibles. Cuiden el tamaño de las porciones, pero sin dejar realmente de disfrutar de la comida. Hagan ejercicio para eliminar las calorías adicionales.
- Empaquen bocadillos más saludables si están pensando en realizar un viaje largo en avión o en coche.
- Beban muchos líquidos.
- Lávense frecuentemente las manos.
- Planeen actividades tales como escalar, hacer buceo, esquí, surf o un recorrido a pie.
Es muy probable que cuando aterricemos en el destino, lo primero que pensaremos será en disfrutar de todos los platillos del lugar, siendo muchos de ellos dulces golosos nada recomendables. Tú y tu familia se los pueden permitir, pero siempre pensando en que la otra comida del día deberá incluir verduras o ensaladas más sanas.
Todos los destinos son aptos para recorrerlos a pie o en bicicleta. Solo hay que tener las ganas de viajar con un estilo de vida saludable para hacerlo. Anímate y anima a tu familia.
Siempre que puedas, procura ser tú (papá, mamá o ambos) quien controle la comida que se prepara durante las vacaciones. Si no es posible que lleves dicho control, por un día no pasa nada, pero por ejemplo, para excursiones de todo el día o actividades similares, siempre puedes comprar los alimentos y prepararlos, para después empacarlos para llevar.
Vía: HealthDay News