Todos los niños en algún momento de su vida introducen artículos no alimenticios a su boca. Este hecho puede vincularse a la curiosidad innata de los menores, naturalmente inquieta acerca de su entorno. Sin embargo, los niños con pica van más allá de esta exploración inocente.
Entre el 10 y el 30% de los niños de 1 a 6 años de edad tienen pica, trastorno alimentario caracterizado por la persistencia convulsiva de antojos no comestibles.
Conoce más: Comer en familia mejora la alimentación de los niños
La pica es más común entre personas con dificultades del desarrollo, como el autismo y discapacidad intelectual, y entre los niños de 2 y 3 años. También puede ser un problema para algunas mujeres embarazadas, así como para las personas con epilepsia.
Algunos artículos que las personas con pica desean con frecuencia son:
- Suciedad.
- Arcilla.
- Pintura.
- Yeso.
- Tiza.
- Maicena.
- Almidón de lavandería.
- Bicarbonato de sodio.
- Granos de café.
- Cenizas de cigarros.
- Cabezas de cerillos (fósforos) quemados.
- Colillas de cigarro.
- Heces.
- Hielo.
- Pegamento.
- Cabello.
- Botones.
- Papel.
- Pasta dental.
- Jabón.
Complicaciones
En la mayoría de los casos, el trastorno dura algunos meses y luego desaparece espontáneamente. Pese a ello, puede continuar hasta los años de adolescencia o adultez, especialmente cuando ocurre a la par de trastornos del desarrollo.
Puede ocasionar:
- Bezoar —una masa de material indigerible atrapada dentro del cuerpo, por lo regular en el estómago—.
- Infecciones.
- Obstrucción intestinal.
- Intoxicación con plomo.
- Desnutrición.
- Estreñimiento.
- Lesiones dentales.
Si tu hijo está en riesgo de padecer pica, consulta a un especialista. Asimismo, si notas que ha consumido alguna sustancia nociva, busca atención médica de inmediato.
Vía: Medline Plus/ Kids Health