Lo difícil no es conseguir una sonrisa reluciente, sino mantenerla así. Para esto, es importante prestar atención a los alimentos que se consumen, hacer a un lado algunos vicios y procurar la higiene bucal.
Te invitamos a seguir las siguientes recomendaciones.
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Mantén una buena higiene bucal
Debes cepillar tus dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental para eliminar la placa y emplear enjuague bucal antiséptico.
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Elige una buena pasta
Te recomendamos tener dos, una de uso regular y otra que sea blanqueadora. Esta última utilízala sólo una o dos veces por semana.
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Evita los pigmentos
Ciertos alimentos —café, té, chocolate, vino tinto, refrescos de cola, entre otros— podrían oscurecer tu sonrisa, debido a que contienen pigmentos que al ser absorbidos por el esmalte de los dientes terminan por mancharlos.
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Utiliza popotes o pajillas
Si vas a consumir alguna bebida capaz de manchar tu dentadura, recurre a los popotes o pajillas, con el fin evitar el paso del líquido por los dientes. A su vez, cepilla o enjuaga los dientes inmediatamente.
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Deja el cigarro
El cigarro puede estropear tu sonrisa, provocando que tus dientes se pongan amarillos, débiles y enfermos.
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Limpia los dientes naturalmente
Algunos alimentos, como las manzanas, las judías verdes, la coliflor, las zanahorias y el apio, ayudan a limpiar los dientes mientras son masticados.
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Consume lácteos
Los productos lácteos, en especial los que son ricos en calcio, ayudan a mantener los dientes blancos. Asimismo, el ácido láctico sirve para prevenir las caries.
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Evita ciertos medicamentos
Existen medicamentos capaces de manchar los dientes y opacar las sonrisas blancas, como la tetraciclina —usado para tratar enfermedades respiratorias—.
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Recurre a los tratamientos de retoque
Si blanqueaste tus dientes con anterioridad, tal vez sea necesario un trabajo de retoque cada seis meses o después de un año o dos.
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No abuses del blanqueamiento dental
Aunque es un buen método para lograr dientes más blancos, también aumenta la sensibilidad. Considera que el exceso de estos tratamientos puede resultar en daño permanente, como la erosión del esmalte dental.
Vía: Hola Doctor/ Medline Plus