Si después de adoptar una alimentación saludable y realizar actividad física, con frecuencia, no logras perder peso, tal vez estés frente a una condición que impide tu objetivo.
A continuación te hablamos sobre tres posibles escenarios que no te permiten adelgazar. No olvides visitar a un médico para tener una opinión profesional y, en su caso, recibir el tratamiento adecuado.
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Hipotiroidismo
La tiroides es una glándula que produce hormonas tiroideas, las cuales controlan el ritmo de muchas actividades en el cuerpo, por ejemplo, la rapidez con que se queman calorías.
Cuando la tiroides no puede producir la suficiente cantidad de hormonas, se denomina hipotiroidismo, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de E.U.
Síntomas: Fatiga, periodos menstruales largos, dolores, sudoración y aumento de peso.
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Estrés
El estrés es ocasionado por el instinto que el cuerpo tiene de defenderse a sí mismo. Cuando permanece por mucho tiempo, puede dañar la salud. A su vez, provoca ansiedad, miedo y tensión, según la Asociación Americana de Médicos de Familia.
Síntomas: Fatiga, depresión, malestares digestivos, dolores de cabeza y musculares, así como alteraciones importantes en el peso.
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Síndrome de ovario poliquístico (SOP)
Esta afección puede afectar el ciclo menstrual de una mujer, la capacidad para tener hijos, el funcionamiento cardíaco, y la apariencia física.
Síntomas: Periodos menstruales poco frecuentes, mayor crecimiento de bello, quistes en los ovarios, acné, dolores, depresión, colesterol alto, calvicie, hipertensión y por último, aumento de peso u obesidad, que generalmente se presenta alrededor de la cintura.
Descarta alguna de estas enfermedades con ayuda de un especialista. Recuerda que, independientemente de tu peso, estos padecimientos pueden desatar otros males crónicos.
Vía: Hola Doctor
