La temperatura que acompaña al invierno no es la mejor aliada de nuestra piel, al provocar estragos que afectan la irrigación de la sangre y la renovación celular; mismos que dejan la tez con un aspecto apagado, seco y sensible.
Si te interesa conocer cinco consejos para mejorar su aspecto, sigue leyendo.
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Limpieza
Ya sea en época de frío o calor, la limpieza es fundamental para lucir un rostro saludable. Toma en cuenta que tus hábitos deben transformarse cada vez que el clima cambia.
Durante el invierno, lo mejor es utilizar jabones con crema, pues hidratan mejor la piel. Llevar una rutina de limpieza adecuada no significa, necesariamente, que debas lavar tu cara muchas veces al día; al contrario, en época de frío puede llegar a resecarse. Elige productos con ingrediente hidratantes, como glicerina.
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Exfoliación
Exfoliar la piel diariamente no es bueno. Sin embargo, hacerlo de una a dos veces por semana ayuda a eliminar las células secas y muertas que se acumulan en la piel.
Esta práctica también facilita una piel suave, al abrir los poros y mantenerlos limpios. Elige exfoliantes ligeros, pues aquellos muy fuertes pueden irritar tu piel.
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Crema hidratante
Es importante mantener la piel hidratada, especialmente después de la exfoliación. Considera que la crema que usaste en verano no es lo que necesitas para proteger tu piel del frío.
Opta por una crema hidratante espesa, pero fácil de absorber. No te enfoques sólo en la piel de la cara, también aplícala en manos, codos y piernas —más de una vez al día—.
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Protección
A pesar de los días nublados, es fundamental que en tu rutina de belleza no falte la protección contra los rayos UV. Si eres mujer, puedes recurrir a maquillaje con SPF, para evitar el uso de muchos productos.
La mayoría de estas bases contiene vitamina B3, C y E, nutrientes que reducen la aparición de arrugas y mejoran la elasticidad de la piel.
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Suficiente agua
Es importante hidratarse del interior al exterior. Si tu organismo se encuentra hidratado, tu piel se humectará desde las capas dérmicas inferiores y superiores, hasta la superficie. Te recomendamos beber de 6 a 8 vasos de agua al día.
Si consideras que nada de esto reduce tus problemas en la piel, visita a un dermatólogo.
Vía: Quién/ Medline Plus
