La vitamina D ayuda a mantener los huesos saludables, así como a evitar el riesgo de sufrir enfermedades graves, incluso mortales, como el cáncer de vejiga.
De acuerdo con diversos estudios, mantener niveles bajos de vitamina D limita la activación de las células que recubren la vejiga. En contraparte, niveles adecuados de este nutriente permiten estimular una respuesta inmunitaria.
En este contexto, el sistema inmunitario ayuda a prevenir el cáncer, al identificar y destruir las células anómalas, según Rosemary Bland, profesora asociada en la Universidad de Warwick, en Inglaterra.
«Se requieren más estudios clínicos para probar esta asociación, pero nuestro trabajo sugiere que los niveles bajos de vitamina D en la sangre podrían prevenir que las células de la vejiga estimulen una respuesta adecuada a las células anómalas», señaló.
Conoce más: Vitamina D podría mejorar sensibilidad a la insulina
Recomendaciones
Puedes obtener vitamina D a través de la exposición al sol —con protector solar— y mediante la alimentación. Muy pocos alimentos contienen esta vitamina en forma natural. Aquí unas opciones.
- Pescados grasos, como el salmón, el atún y la caballa.
- Hígado vacuno, queso y yema de huevo.
- Hongos.
- Leche fortificada con vitamina D. Considera que, en general, los alimentos a base de leche, como el queso y el helado, no están fortificados.
- Ciertos cereales para el desayuno y algunas marcas de jugos de naranja, yogures, margarinas y bebidas —a base de soja— contienen vitamina D agregada.
Independientemente de tu alimentación, consulta con un médico si padeces alguna deficiencia nutricional. Considera que la cantidad de vitaminas y minerales que necesitas por día depende de tu edad. Este punto puede ser aclarado por un especialista.
Vía: Health Library