Los niños necesitan zapatos bien ajustados y resistentes que protejan y beneficien a sus pies en crecimiento.
Para lograrlo, la Asociación Podiátrica Médica de Estados Unidos te ofrece lo siguientes consejos para comprarle los zapatos correctos a tu pequeño o pequeña:
- Es normal que los pies de un niño crezcan rápidamente, por lo que los tamaños pueden cambiar cada pocos meses. Siempre mide los pies de tu hijo antes de que le compres un par de zapatos.
- Los zapatos que no encajan bien pueden causar malestar e irritación. Vigila regularmente si esto ocurre en los pies de tus niños, así como los signos de desgaste irregular del calzado, ya que podrían requerir el cuidado de un podólogo.
- Evita los zapatos de segunda mano, que pueden no encajar bien y podrían propagar una infección por hongos.
- Cuando se trata de calzado infantil, no hay tal cosa como un «período de entrada» necesario. Es decir, debes asegurarte que los zapatos sean cómodos desde el principio.
- Si los pies de tu niño son de diferentes tamaños, compra el tamaño adecuado para el pie más grande.
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Recuerda que los zapatos son una prenda de vestir que sirve para proteger el pie del frío y de posibles traumatismos (golpes/lesiones). Asimismo y principalmente en el caso de los bebés, no se consideran un elemento indispensable (sólo necesitan calcetines en invierno para protegerse del frío).
Sumado a estos consejos, debes checar que los calcetines no opriman y sean de tejidos naturales. Para los niños que gatean existen zapatos con puntera reforzada, la cual evita lesiones en los dedos. Pregunta al médico por ellos y si son recomendables para tu niño(a).
Finalmente, ciertas patologías ortopédicas requieren de zapatos especiales u órtesis (plantillas, taloneras, alzas) que siempre deben ser recomendadas por el especialista previa revisión del menor.
