Aunque, en apariencia, la escuela pareciera ser un lugar seguro para los niños. Lo cierto es que, por más control que exista en las instituciones, no son un lugar exento de accidentes.
Independientemente de la edad de los niños, los accidentes escolares son algo que puede ocurrir en cualquier momento, indicó Gibrán Melchor Villanueva Ortiz, médico adscrito a la Unidad de Medicina Familia (UMF) 167 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco.
De acuerdo con el experto, los accidentes escolares pueden ir desde lesiones provocadas por tijeras demasiado filosas, hasta fracturas a causa de caídas.
Para prevenir en medida de lo posible estos accidentes, el experto recomendó las siguientes medidas:
1 Los padres de familia deben supervisar los útiles escolares de sus hijos, evitando la presencia de cualquier instrumento punzocortante, o cualquier otro que pueda llegar a convertirse en un arma y afectar la integridad del menor o de otras personas.
2 Explicar a los niños que no deben empujarse ni correr en los pasillos o escaleras.
3 Exhortar a los adolescentes a seguir las instrucciones de su profesor(a) de educación física o entrenador, a fin de evitar fracturas, esguinces o torceduras.
Villanueva Ortiz expuso que uno de los accidentes escolares más graves puede ser un traumatismo cráneo-encefálico, derivado de alguna caída o fuerte golpe en la cabeza.
Ante una urgencia como esta, el especialista subrayó que lo más importante es buscar apoyo de unidades médicas, así como llevar a cabo los primeros auxilios.
Si tras un golpe en la cabeza el menor está somnoliento, o si su estado de alerta está disminuido, se debe observar si hay dolor de cabeza o vómito. “Un médico debe determinar cuanto antes si hay fractura dentro y fuera de la bóveda craneal”, dijo.
Vía: Notimex