Puede que la idea de pesarse continuamente y ver su peso en la báscula no suene atractiva para la mayoría de las personas. Sin embargo, esta acción ha demostrado tener efectos positivos a la hora de bajar de peso, encontró un reciente estudio.
De acuerdo con el estudio, que aparece publicado en la edición online de la revista especializada Journal of Behavioral Medicine, las personas que se pesaron al menos una vez al día perdieron más peso a lo largo de dos años.
“Las pérdidas fueron modestas pero significativas, sobre todo si se tiene en cuenta que estas personas no formaban parte de un programa para perder peso”, indicó Diane Rosenbaum, investigadora que participó en el estudio y estudiante de postgrado en la Universidad de Drexel, en Pensilvania, Estados Unidos.
“Pesarse uno mismo con regularidad puede motivarle a realizar conductas alimentarias y de ejercicio saludables, porque ofrece evidencias de que esas conductas son efectivas para ayudar a perder peso o prevenir el aumento de peso”, explicó por su parte Meghan Butryn, profesora asociada en la citada universidad.
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“De forma similar, si uno ve un aumento de peso en la báscula, esa información puede motivarle a realizar un cambio” saludable en su rutina, agregó la catedrática.
Las expertas expusieron que el simple hecho de pesarse continuamente debe formar parte de un plan enfocado en mejorar nuestra salud integral. Pues de nada servirá pesarnos con frecuencia si no estamos haciendo nada al respecto para bajar de peso, como realizar ejercicio o llevar una dieta más saludable.
Lo ideal, más que dietas y remedios caseros, es realizar un plan de actividad física acorde a nuestra complexión y objetivos, asesorado siempre por un profesional. Seguir un plan de alimentación balanceado que haya sido prescrito por un nutriólogo.
Vía: Health Day News