Reducir el consumo de sal se ha convertido en una recomendación básica para mantener una buena salud. Lamentablemente, los mexicanos utilizamos este condimento para todas las comidas, incluso en aquellas que no lo necesitan. Además, medir el sodio es esencial para prevenir la hipertensión arterial, padecimiento que puede provocar ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y enfermedades renales.
De acuerdo con especialistas, el 70% de la ingesta de sal procede de 25 alimentos, y casi la mitad de este consumo proviene de 10 alimentos específicos.
1. Pan.
2. Pizza.
3. Sándwiches.
4. Carnes frías y embutidos.
5. Sopas.
6. Burritos y tacos.
7. Tentempiés salados (como papas fritas, galletas saladas y pretzels).
8. Pollo.
9. Queso.
10. Huevos y tortillas.
Si bien las 10 fuentes principales no varían, la clasificación puede cambiar según la edad. Es decir, en los niños pequeños, los tentempiés salados son la principal fuente. La pizza es la número uno entre los niños y los adolescentes; en tanto, los adultos consumen mayor cantidad de sodio a través del pan.
Recomendaciones
Según la Asociación Americana del Corazón (AHA), consumir la suficiente cantidad de potasio ayuda a mitigar los efectos del sodio en la presión arterial. En este sentido, es posible eliminar más sodio mediante la orina y ayudar a relajar las paredes de los vasos sanguíneos.
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No olvides probar la comida antes de comer. “Aunque los alimentos empaquetados y procesados son los que contienen más sodio, reducir la cantidad de sal que agregas al momento de comer en la mesa puede hacer la diferencia. Muchas personas toman el salero de forma automática y condimentan su comida antes de probarla, cuando, por lo general, ya tiene suficiente cantidad de sal”, aconsejó Maxine Siegel, dietista de Consumer Reports.
Vía: Consumer Reports
