Los problemas en la salud cardíaca y enfermedades cardiovasculares comúnmente son vistos como algo propio de la edad adulta. Lamentablemente, en nuestro país es cada vez más frecuente encontrar a jóvenes, e incluso niños, con estas afecciones.
Durante los últimos 17 años, los fallecimientos por enfermedades cardiovasculares en niños y jóvenes de entre 5 y 24 años de edad se duplicaron, debido a los cambios en el estilo de vida, alertó David Barreto, pediatra del Hospital Regional Adolfo López Mateos del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
En los niños, uno de los problemas que desencadena la aparición de esta clase de afecciones cardíacas es el síndrome metabólico. De acuerdo con el experto, el síndrome metabólico es un conjunto de factores de riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2 de forma precoz.
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Dichos factores de riesgo en los niños son:
-Obesidad de predominio central o abdominal
-Hipertensión
-Niveles anormales de grasa en la sangre (colesterol malo y triglicéridos)
-Hiperglucemia (aumento anormal de la cantidad de glucosa que hay en la sangre)
Esto se debe en gran parte, detalló, a que los niños actualmente consumen cada vez más calorías provenientes de carbohidratos y menos proteínas, lo cual ocasiona un desequilibrio entre la ingesta de calorías y las que se queman.
Para evitar estos lamentables problemas, cuidar el corazón y la salud integral de los jóvenes y niños, se recomiendan los siguientes consejos:
-Menos sal y azúcar.- Consumir demasiada sal hace que las arterias pierdan elasticidad y se endurezcan, lo que provoca que el corazón sufra y dificulte su trabajo normal. Por otra parte, el consumo en exceso de azúcar provoca que el cuerpo no sea capaz de asumirlo, provocando que se transforme en grasa, siendo una de las principales causas de obesidad.
-Más grasas vegetales.- El consumo de grasas de origen animal aumenta el nivel de grasas saludables en nuestro organismo. El consumo de grasas no saturadas, como el aceite de oliva o la margarina, ayudan a bajar los riesgos de padecer problemas en el corazón.
-Consumo de pescado azul.- Es importante intentar que los pequeños coman pescado azul como mínimo dos veces por semana, para cuidar su corazón.
-Aumentar el consumo de fruta y verdura.- La fruta y verdura aportan fibra, vitaminas y antioxidantes que sirven de combustible para el buen trabajo del corazón. Trata de dárselos como colación entre comidas.
-Fomentar la actividad física.- La Organización Mundial de la Salud recomienda que los niños realicen un mínimo de 60 minutos de actividad física al día.
Vía: Notimex
