El hábito de fumar es completamente nocivo para la salud. Daña casi todos los órganos del cuerpo y causa el más del 80% de las muertes por cáncer de pulmón. Pero eso no es todo, también predispone a una mayor incidencia de afecciones respiratorias durante el invierno, de acuerdo con el jefe del servicio de Urgencias del Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Ramón Iván de Dios Pérez.
Conoce más: Cáncer de pulmón, responsable de 6,000 muertes al año
A decir del especialista, el humo de cigarro genera una inflamación o irritación permanente al ingresar al cuerpo. “Esto vulnera al aparato respiratorio ante virus y bacterias característicos de la época de frío, como el resfriado común, (mismo) que puede derivar en una neumonía si no se tienen los cuidados necesarios, entre ellos, evitar el tabaquismo”, dijo.
En este sentido, fumar debilita las funciones del sistema respiratorio, al perder la flexibilidad y capacidad de los pulmones para recibir oxígeno. Lamentablemente, el daño crónico causado por el tabaco puede sumarse a una enfermedad respiratoria. En este tipo de casos, no sólo va a aumentar la dificultad para realizar actividades por falta de aire, también existirá mayor probabilidad de requerir atención médica especializada.
“Los daños causados por el tabaquismo son irreversibles y progresivos. No sólo derivan en enfermedades respiratorias, también en cardiovasculares. Llega un punto en el que ponen en peligro la vida y los pacientes presentan más complicaciones”, apuntó.
Ante cualquier síntoma de resfriado, visita a un especialista en salud, principalmente si detectas indicios de enfermedad de obstrucción pulmonar crónica (EPOC), como:
- Tos con mucha flema.
- Dificultad para respirar, sobre todo al ejercitarse.
- Sibilancias.
- Opresión en el pecho.
Vía: Notimex/ Medline Plus
