La contaminación se ha convertido en una de las principales amenazas para la salud integral de las personas. En este escenario, los niños son quienes parecen más vulnerables por el hecho de respirar aire contaminado, señaló un reciente informe.

La contaminación que impera en el aire de una gran parte del mundo es peligrosa para el desarrollo del cerebro y la salud cognitiva de los niños, indicó el informe ‘Peligro en el Aire’, publicado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

De acuerdo con los resultados del informe, la contaminación en el aire “impacta en el aprendizaje de los niños, su memoria, su capacidad lingüística y motriz”, apuntó Nicholas Rees, autor del documento y especialista en análisis de políticas en la División de Política y Estrategia de la UNICEF con sede en Nueva York, Estados Unidos.

Los vínculos de la contaminación atmosférica con el asma, la bronquitis y otras enfermedades respiratorias son conocidos desde hace tiempo, agregó el especialista.

“Pero un número creciente de investigaciones científicas destacan un nuevo riesgo potencial planteado por la contaminación del aire para la vida y el futuro de los niños: el impacto en el desarrollo del cerebro”, destacó.

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Según el informe, la contaminación afecta la salud y las funciones cerebrales “como la memoria, el cociente intelectual (verbal y no verbal) y otros problemas neurológicos”.

Asimismo, las partículas finas de la contaminación urbana pueden dañar la barrera de la membrana encargada de proteger el cerebro de sustancias tóxicas, y con ello elevar los riesgos de desarrollar enfermedades como el Parkinson y Alzheimer entre los ancianos, agrega el documento.

La UNICEF exhortó a incrementar la lucha contra la contaminación y a reforzar la protección de los niños. Para ello, recomienda tomar acciones como:

1 Ayudar a los niños a respirar aire no contaminado mediante el uso de mascarillas o cubrebocas.

2 No fumar ni permitir a otras personas fumar cerca de niños, ni en la casa o automóvil.

3 Mantener el hogar lo más limpio posible. El polvo, moho, los insectos, el humo del tabaco y la caspa de los animales domésticos pueden causar ataques de asma y alergias.

4 Evitar las actividades al aire libre cuando haya anuncios de alerta a causa de altos niveles de contaminación en el aire.

5 Para no contribuir a la contaminación del aire: caminar, usar la bicicleta, participar en grupos para compartir transporte en automóvil privado y usar transporte público.

6 Evitar dejar prendido el motor de los vehículos innecesariamente.

7 No hacer fogatas ni prender fuego al aire libre.

 

Vía: AFP