Realizar actividad física con frecuencia ha sido asociado con un gran número de beneficios para la salud integral, entre los que se incluye un mejoramiento en la calidad de vida de las personas que han superado el cáncer. Pero poco se sabía hasta ahora sobre el efecto que tiene en las personas que padecen linfoma.
De acuerdo con un reciente estudio estadounidense, practicar actividad física parece ayudar a las personas con linfoma a sobrevivir a su enfermedad.
El linfoma es un cáncer que se origina en una parte del sistema inmunitario, llamado sistema linfático. En la actualidad los médicos no pueden determinar por qué una persona desarrolla linfoma, sólo se sabe que una persona está en mayor riesgo de desarrollarlo si tiene un sistema inmunitario débil o cierto tipo de infecciones.
“Como médicos, recomendamos la actividad física para todos los supervivientes al cáncer a fin de mejorar la calidad de vida en general, pero no sabíamos si la actividad física tendría un impacto en la supervivencia de los pacientes con linfoma”, apuntó la doctora Priyanka Pophali, autora del estudio y experta en hematología y oncología.
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“Nuestros hallazgos muestran que la actividad física puede tener un impacto positivo en la supervivencia de los pacientes con linfoma”, señaló.
En el estudio, cuyos resultados fueron presentados en la reunión anual de la Sociedad Americana de Hematología (ASH, por sus siglas en inglés), se encontró que las personas cuyo nivel de actividad física era mayor que antes del diagnóstico, tenían menos probabilidades de fallecer a causa de linfoma o de cualquier otra causa, en comparación con los pacientes menos activos.
Asimismo, las personas que aumentaron el tiempo y la intensidad de su actividad física después de que les diagnosticaran esta enfermedad, también presentaron menos probabilidades de fallecer hasta tres años después, en comparación con quienes no aumentaron su nivel de actividad, detallaron los investigadores.
“Es importante indicar que nuestro estudio muestra un beneficio para la supervivencia en los pacientes que aumentan su nivel de actividad física. Por tanto, dado que las conductas sobre la actividad física se pueden modificar, los médicos deberían aconsejar a los pacientes y a los supervivientes sobre la importancia de la actividad física y animarles a mantener y aumentar su nivel de actividad física”, manifestó la doctora Pophali.
Vía: Health Day News
