El consumo de alcohol es algo común y cotidiano en gran parte del mundo. Sin embargo, este hecho no implica que se trate de un hábito saludable. Todo lo contrario, el consumo frecuente de bebidas alcohólicas está relacionado con múltiples daños a la salud integral.
Entre la población en general suele existir un debate sobre cuál es la cantidad o la frecuencia de consumo que se relaciona con los efectos negativos para la salud. Los cierto es que los expertos en salud aseguran que tan solo consumir alcohol en exceso una sola vez pone en riesgo a las personas.
Beber demasiado alcohol, incluso una sola vez, puede causar daños tanto a la persona que bebe como a otros, por ejemplo puede ser la causa de:
-Accidentes automovilísticos.
-Caídas.
-Ahogamiento.
-Suicidio.
-Cometer un delito relacionado con la violencia, agresión sexual, violación o incluso homicidio.
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Sobre el consumo moderado, los especialistas detallan que una persona puede llegar a padecer los efectos negativos del alcohol si:
-Es un hombre que toma 15 tragos o más a la semana, o a menudo toma 5 tragos en un corto periodo de tiempo.
-Es una mujer que toma 8 tragos o más a la semana, o a menudo toma 4 tragos en un corto periodo de tiempo.
Por un trago se entiende una cerveza de 355 mililitros (ml), una copa de vino de 148 ml, o una copa de licor de 44 ml.
Consumir alcohol de manera prolongada aumenta de forma importante las probabilidades de:
-Sangrado de estómago o esófago (que es el conducto a través del cual viaja la comida de la garganta al estómago).
-Inflamación y daños en el páncreas (órgano encargado de producir sustancias que el cuerpo necesita para su adecuado funcionamiento).
-Daño al hígado. Cuando es grave, a menudo lleva a la muerte.
-Desnutrición.
-Cáncer de esófago, hígado, colon, cabeza, cuello, de mama y otras áreas.
-Dificulta el control de la presión arterial alta.
-Lleva a problemas cardíacos en algunas personas.
En el ámbito de la salud mental, el alcohol puede:
-Afectar la capacidad de razonamiento y juicio.
-Provocar daño a las neuronas, lo cual puede ocasionar un daño permanente a la memoria.
-Aumentar o empeorar sentimientos de tristeza, depresión, nerviosismo o preocupación.
-Causar problemas de sueño o agudizarlos.
-Aumentar el riesgo de suicidio.
Los expertos destacan que incluso en las personas que aseguran ser bebedores responsables, tomar demasiado alcohol sólo una vez puede ser dañino, por lo que exhortan a limitar al máximo el consumo de esta sustancia.
Vía: MedlinePlus