Se le denomina aptitud física a la capacidad que tienen las personas para realizar actividades físicas laborales, recreativas y cotidianas sin cansarse en forma desmedida. Y si bien podría tratarse de un aspecto que solo repercute en lo físico, lo cierto es que influye en toda la salud integral.
Gozar de una adecuada aptitud física cuando nos encontramos en la mediana edad puede suponer un gran beneficio para nuestra salud mental y cardíaca a futuro, encontró una reciente investigación.
Esto quiere decir que si nos mantenemos en una forma saludable durante la adultez, al momento de llegar a la tercera edad disminuyen los riesgos de desarrollar enfermedades mentales y cardíacas, indicó el doctor Benjamin Willis, investigador principal del estudio y epidemiólogo en el Instituto Cooper, en Dallas, Estados Unidos.
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De acuerdo con el experto, si una persona tiene una buena aptitud física en la mediana edad se está protegiendo de enfermedades como la depresión cuando tenga una edad avanzada, así como también verá disminuido su riesgo de fallecer por alguna enfermedad cardíaca.
Aptitud física y salud integral
“Las personas deberían saber que la depresión y la aptitud física no solo están entrelazadas, sino que también pueden resultar en cambios orgánicos de su riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca”, apuntó el doctor Satjit Bhusri, cardiólogo en el Hospital Lenox Hill en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.
Esto quiere decir que una mejora sustancial en la aptitud física repercute directamente en la salud mental y cardíaca. Para mejorar la aptitud física no hay nada como realizar ejercicio con frecuencia.
La buena noticia es que los beneficios del ejercicio aparecen independientemente de la edad a la que se comienza a realizar, indicó el experto. “Nunca es demasiado tarde para empezar a hacer ejercicio”, aseguró.
Algunos ejemplos de actividades físicas entre moderadas e intensas que ayudan a mejorar la aptitud física son:
-Caminar
-Trotar
-Nadar
-Andar en bicicleta
“Lo que estamos aprendiendo cada vez más es que el ejercicio es un potente antidepresivo. El ejercicio quizá no solo le ayude con su salud cardíaca, sino también con la salud mental, la felicidad y el bienestar general”, subrayó por su parte el doctor Scott Krakower, jefe asistente de la unidad de psiquiatría del Hospital de Zucker Hillside en Glen Oaks, Nueva York.
Vía: Health Library
