Salir y estar en contacto con la naturaleza aporta más beneficios de los que podrías imaginar. Si bien ya se sabía que los espacios verdes se relacionan con un mejor descanso, así como con efectos positivos en la salud mental y visual, un nuevo estudio ha revelado que estar al aire libre tiene un fuerte impacto en el bienestar a largo plazo.

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Para llegar a esta premisa, un equipo de investigación estudió datos de 20 países —se recopiló evidencia de más de 140 estudios que involucraron a más de 290 millones de personas—. Con la finalidad de descubrir si la naturaleza realmente proporcionaba un impulso positivo, se analizó la salud de personas con poco acceso y se comparó con la de aquellas que tenían más exposición. Los resultados indicaron que los espacios verdes:

  1. Reducen el riesgo de diabetes tipo 2.
  2. Disminuyen las probabilidades de parto prematuro.
  3. Mejoran y aumentan la duración del sueño
  4. Nivelan la presión arterial, así como la frecuencia cardíaca.
  5. Reducen el estrés, la ansiedad y la depresión. 

«Las personas que están en contacto con los espacios verdes probablemente tengan más oportunidades para la actividad física y la socialización. Mientras tanto, la exposición a una variedad diversa de bacterias presentes en áreas naturales, también puede tener beneficios para el sistema inmune y reducir la inflamación”, explicó la autora principal, Caoimhe Twohig-Bennett, especialista de la Universidad de East Anglia, en Inglaterra.

El «espacio verde» fue definido como un terreno abierto con vegetación natural, así como espacios verdes urbanos, que incluían parques y zonas verdes de las calles. Te recomendamos buscar áreas naturales dentro de tu comunidad y salir a pasear. Puedes aumentar los beneficios si te activas físicamente; correr, trotar o andar en bici son las mejores opciones.

¡Sal y experimenta los beneficios por ti mismo! 

 

Vía: Hola Doctor