A través del metabolismo, tu cuerpo produce y consume energía. Se dice que acelerarlo ayuda a quemar calorías y a aumentar la pérdida de peso. Sin embargo, existen muchos mitos sobre el tema.
A continuación, te decimos seis mitos y sus realidades ¡Presta atención!
1. El ejercicio acelera tu metabolismo, aún después de hacerlo.
Realidad: La pérdida de calorías durante el ejercicio es inminente. Sin embargo, este hecho se prolonga únicamente durante el tiempo que dura la actividad.
Es posible que sigas quemando calorías adicionales por una hora más. Pese a ello, una vez que dejes de moverte, tu metabolismo volverá al ritmo que tiene cuando estás en descanso.
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2. Aumentar la masa muscular te ayudará a bajar de peso.
Realidad: El músculo quema más calorías que la grasa. Entonces, formar más músculos estimulará tu metabolismo, pero sólo en una pequeña medida. Cuando no se están usando activamente, los músculos queman muy pocas calorías.
3. Comer ciertos alimentos puede acelerar tu metabolismo.
Realidad: La ingesta de té verde, cafeína y ciertos chiles picantes no te ayudará a bajar el peso excedente. Algunos alimentos pueden dar un pequeño estímulo al metabolismo, pero no el suficiente para hacer una diferencia en tu peso.
4. Hacer comidas pequeñas durante el día acelera tu metabolismo.
Realidad: Desafortunadamente, hay poca evidencia científica que indique que hacer comidas pequeñas y frecuentes acelera el metabolismo. Sin embargo, distribuir las comidas a lo largo del día puede evitar el hambre en demasía y, en consecuencia, que comas en exceso.
5. Dormir bien por la noche es bueno para tu metabolismo.
Un buen descanso no acelerará tu metabolismo, pero la falta de él puede provocar un aumento de peso. Las personas que no duermen lo suficiente tienden a consumir más calorías de las que necesitan.
6. Subirás de peso a medida que envejezcas, pues tu metabolismo se desacelerará.
Si bien el metabolismo es más lento al envejecer, gran parte del aumento de peso que se da con la edad tiene que ver con la poca actividad física que se realiza. A medida que envejecemos, también aparecen problemas para regular el tamaño de las comidas.
Vía: Medline Plus