Se conoce como autoestima al aprecio o consideración que una persona tiene de sí mismo. Este se conforma de un conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de comportamiento hacia nuestra persona, manera de ser y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y carácter.
Aunque parezca que debido a su complejidad es un aspecto exclusivo de los adultos, la autoestima tiene un papel importante en el desarrollo saludable de los niños y adolescentes.
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Por ello es importante que los padres valoren la importancia que este aspecto puede tener en sus hijos, sepan identificar cuando hay problemas de autoestima y cómo ayudar a los pequeños a desarrollarla de forma adecuada.
Señales
Algunas de las características que comparten los niños que tienen un alto aprecio por ellos mismos incluyen:
-Se sienten valorados y aceptados.
-Se sienten seguros.
-Sienten orgullo de lo que son capaces de hacer.
-Piensan cosas buenas sobre sí mismos.
-Creen en ellos mismos.
En cambio, algunas señales de que algo no va bien con su aprecio a sí mismos son:
-Se muestran críticos y duros consigo mismos.
-Sienten que no son tan buenos como otros niños.
-Piensan en las veces que fracasan más que en las que tienen éxito.
-Carecen de confianza.
-Dudan de que puedan hacer las cosas correctamente.
Consejos
Son varias las acciones que pueden llevar a cabo los padres para ayudar a sus hijos a fomentar una autoestima saludable, entre las que se encuentran:
-Ayudarlos a aprender a hacer cosas nuevas.
-No hacer que los nuevos desafíos sean muy fáciles ni muy difíciles.
-Elogiarlos, pero hacerlo prudentemente.
-Ser un adecuado modelo de conducta.
-Demostrar una actitud adecuada (realizar las labores sin refunfuñar o quejarse y sentirse orgulloso por un trabajo bien hecho).
-Prohibir la crítica cruel.
-Enfocarse en las fortalezas en lugar de las debilidades.
-Permitir que los niños ayuden y den.
Vía: Kid’s Health
