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Para mantener un peso saludable, medir cuánto comes (es decir controlar el tamaño de tus porciones) es tan importante como lo que comes, así lo indica el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos (NIDDK).

Tu tamaño de porción óptimo puede o no coincidir con el tamaño de la porción que figura en un producto. Esto depende de tu edad, peso y metabolismo, así como de otros factores.

Por ello, para administrar las porciones de alimentos en el hogar, la agencia recomienda lo siguiente:

  1. No comas más de lo que hay en la caja o bolsa. Saca una porción y cómela en un plato.
  2. Evita comer frente a la televisión o mientras estés ocupado con otras actividades.
  3. Concéntrate en lo que está comiendo, mastica bien y disfrute de tu comida.
  4. Come menos alimentos con alto contenido de grasas y calorías.
  5. Congela los alimentos que no servirás o comerás de inmediato.
  6. Come comidas a horas regulares.
  7. Compra refrigerios bajos en calorías.

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RECUERDA: Una porción es la cantidad de comida que eliges comer a la vez, ya sea en un restaurante, la que viene en un paquete o en tu casa.

Una ración, o el tamaño de una ración (término inglés «serving» o «serving plate»), hace referencia a una cantidad fija, una cantidad estándar de medida de los alimentos (una taza, una pieza, un kilo, por ejemplo) y constituye la cantidad de un alimento que se recomienda comer. Tal información aparece a manera de lista en los Datos Nutricionales de un producto o en la etiqueta de los alimentos.

 

Vía: Health Day News / NIDDK

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