Los estados de ánimo y las emociones son complejos. Se cree que tres factores se combinan para crearlos en el cerebro: biología (por ejemplo, hormonas y sustancias químicas del cerebro), psicología (como la personalidad y las respuestas aprendidas) y el medio ambiente (como enfermedades y estrés emocional).
Por ello, a continuación te mencionamos las causas comunes y cotidianas de un estado de ánimo negativo:
- Estrés
- Falta de sueño, cansancio y exceso de trabajo
- Necesidad de comer
- Interacciones con las personas que te rodean
- Noticias
- El clima
- Cambios hormonales, como debido a la menstruación, pubertad, menopausia o embarazo
- Falta de ejercicio
- Necesidad de descansar
- Otras causas de un estado de ánimo negativo pueden incluir:
- Consumo de drogas y alcohol
- Nutrición pobre
- Efectos secundarios de medicamentos
- Depresión
- Ansiedad
- Abuso de sustancias
- Trastorno por déficit de atención e hiperactividad
- Trastorno bipolar
- Demencia
- Enfermedad física o dolor crónico.
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Algunas de estas causas, como por el ejemplo la nutrición, el ejercicio y los hábitos de sueño, o el uso de alcohol y otras drogas, están relacionados con el estilo de vida.
Sin embargo, tu entorno también puede afectar tu estado de ánimo de muchas maneras, que incluyen:
- Ciertos productos químicos en tu entorno pueden desencadenar una reacción negativa, como cuando se ingieren aditivos y conservadores en los alimentos, o pesticidas utilizados en la agricultura.
- Fluctuaciones estacionales en la luz del día y el clima: el mal tiempo o la luz del día limitada pueden hacer que te sientas mal o que te dificulta la vida.
- La contaminación acústica y la mala calidad del aire pueden afectar su salud y bienestar mental y físico.
- Los desastres naturales pueden generar un estrés significativo en tu mente y cuerpo.
RECUERDA: Si tu estado de ánimo está afectando tu calidad de vida, consulta a un especialista en salud mental.