De acuerdo con un nuevo estudio publicado en la revista Journal of the American Medical Association, los bebés pueden infectarse con la nueva COVID-19, pero sus episodios parecen ser más leves que los de las personas mayores y aquellas con problemas de salud crónicos.
Para descubrirlo, médicos en China monitorearon a nueve bebés infectados con COVID-19 que aparentemente se contagiaron por un familiar enfermo, y ninguno de ellos cayó en estado de gravedad.
Según los investigadores, ninguno de los bebés enfermos requirió cuidados intensivos, no tuvieron complicaciones graves ni fue necesario que usaran un respirador.
El nuevo informe es «una prueba de principio que muestra que los bebés pueden infectarse», la cual se suma a los informes anteriores de bebés que contrajeron COVID-19, señaló el doctor David Kimberlin, miembro del Comité de Enfermedades Infecciosas de la Academia Estadounidense de Pediatría.
El estudio también concuerda con otros informes preliminares de que «cuando un niño más pequeño se infecta, parece ser una enfermedad más leve que la que se observa en los casos más graves en adultos mayores», indicó Kimberlin.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), solo el 2.4% de los casos reportados en China ocurrieron en niños y solo el 0.2% de los casos involucran enfermedades críticas en menores de edad. Hasta el momento, no ha habido informes de muertes pediátricas relacionadas con COVID-19.
«En las personas mayores, sus cuerpos han sufrido más lesiones a lo largo de sus años de vida en este planeta. Sus pulmones podrían ser menos flexibles que los pulmones de un niño. Simplemente se enferman más por diversas enfermedades pulmonares», explicó Kimberlin.
«Suponemos que los niños que están infectados con este virus simplemente lo manejan mejor porque sus cuerpos son más jóvenes y resistentes», agregó.
De los nueve bebés en el informe, solo cuatro tuvieron fiebre. Otros dos tuvieron tos y secreción nasal o mucosa.
COVID-19 y recién nacidos
Por su parte, el doctor Rahul Gupta, director médico de March of Dimes, dijo que hay más preocupación por el posible daño a los recién nacidos de las mujeres embarazadas que contraen la COVID-19.
Brotes previos del coronavirus del SARS (síndrome respiratorio agudo severo) y MERS (síndrome respiratorio del Medio Oriente) se asociaron con parto prematuro y recién nacidos de bajo peso al nacer, y algunos informes muestran que esto podría ocurrir con la COVID-19, advirtió Gupta.
La buena noticia es que un par de estudios realizados en China reportaron que el COVID-19 no parece transmitirse de madres embarazadas a recién nacidos. Estos estudios monitorearon a 13 recién nacidos en total, y no encontraron ninguna evidencia de que hubieran nacido con COVID-19. Parte de estos resultados se publicaron en la revista Frontiers in Pediatrics.
Recomendaciones
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), los padres que deseen proteger a sus bebés o niños pequeños de la COVID-19 deben contactar inmediatamente a sus pediatras por teléfono si muestran alguno de los síntomas, para que puedan ayudarlos a controlar la condición.
También pueden prevenir la propagación del virus limpiando y desinfectando las superficies que se tocan regularmente en las áreas comunes del hogar, y lavando regularmente la ropa, ropa de cama y artículos como juguetes de peluche, añaden los CDC. Si es posible, usen la configuración de agua más cálida y luego sequen los artículos por completo.
Vía: Health Day News
