Debido al encierro por COVID-19, los niños y adolescentes confinados están experimentando mucho estrés y ansiedad que ha potenciado el decir groserías en su hogar, muchas veces insultando y faltándole el respeto a sus padres, hermanos u otros familiares o seres queridos.
Según la Academia Estadounidense de Pediatría, los niños y adolescentes suelen utilizar malas palabras para impresionar a los amigos y retar a los padres, y en momentos de crisis es común que las digan para llamar la atención o liberar tensión.
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Por ello y para ayudar a controlar la cantidad de groserías que dicen tus hijos durante la cuarentena, la academia sugiere los siguientes tips:
- Establece una regla que indique que NO está permitido decir groserías en casa.
- No respondas a la grosería o insulto de tu hijo con «palabrotas» propias.
- Nunca castigues a tu hijo con algún tipo de violencia física por decir groserías; es incorrecto, extremo e ineficaz.
- Recompensa a tu hijo cuando exprese su frustración de manera apropiada y ayúdalo a hacerlo. Explícale con amor y calma que están juntos en esto y que no durará para siempre, pero debe ser paciente.
Vía: Health Day News