En un estudio reciente de casos pediátricos positivos para COVID-19, se encontró que uno de cada 5 niños tenía al menos una afección subyacente, lo que demuestra su vulnerabilidad.
Con un sistema inmunitario comprometido, un niño puede experimentar rápidamente síntomas más graves de esta enfermedad infecciosa, como neumonía, pues no tiene las defensas inmunitarias necesarias para protegerse del virus por sí solo.
Con base en lo anterior, aquí te mencionamos algunas condiciones crónicas que aumentan el riesgo de COVID-19 en niños y de que desarrollen síntomas graves:
- Trastornos autoinmunes, como la enfermedad de Crohn, el lupus o la artritis reumatoide.
- Cáncer.
- Enfermedad renal crónica (ERC).
- Enfermedad pulmonar crónica o asma moderada a grave.
- Diabetes.
- Afecciones cardíacas graves.
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Consideraciones importantes
Además de estas afecciones, existe otro factor de riesgo para posibles complicaciones graves causadas por COVID-19 del que seguramente ya escuchaste: la obesidad.
«La comunidad médica pediátrica ha estado observando un posible vínculo entre la obesidad y el tipo más grave de enfermedad por coronavirus tanto en niños como en adultos», señaló la doctora Lisa Meli, pediatra en Hackensack Meridian Medical Group (Estados Unidos). «Los padres o cuidadores con niños que padecen sobrepeso para su edad o que han sido diagnosticados con una afección crónica deben hablar con su pediatra sobre las preocupaciones relacionadas con el coronavirus y seguir las medidas de prevención adecuadas, incluido el lavado de manos y las prácticas frecuentes de limpieza/desinfección en el hogar».