Durante la pandemia de COVID-19, mucha gente se ha dado a la tarea de desechar residuos de limpieza y desinfección en el inodoro, esto porque creen que mantenerlos en un bote de basura significa un posible riesgo de contagio. Sin embargo, enviar todo por el drenaje no es la opción más acertada, ya que se pueden causar serios problemas.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) señala que las personas solo deben tirar papel higiénico en el inodoro. Las toallitas desinfectantes y otros artículos de este tipo deben desecharse adecuadamente en la basura, no en la taza del baño. Dichas toallitas y otros artículos no se descomponen en las alcantarillas o en los sistemas sépticos, y pueden dañar las tuberías internas de tu hogar así como los sistemas locales de recolección de aguas residuales.
Como resultado, tirar estas toallitas puede obstruir tu inodoro y/o crear reservas de aguas residuales en tu hogar o vecindario. Además, las toallitas desinfectantes pueden causar daños significativos a las tuberías, bombas y otros equipos de tratamiento de aguas residuales. Los sistemas de seguridad de las alcantarillas podrían convertirse en una amenaza para la salud pública, y presentarían un desafío para los servicios de agua al desviar los recursos de trabajo esenciales que se realizan para tratar y administrar las aguas residuales de una ciudad o un país. Por ello, las toallitas desinfectantes, las toallitas húmedas y las toallas de papel NUNCA deben enjuagarse ni tirarse en el inodoro.
Vía: EPA