Un grupo de científicos afirma haber detectado signos de inmunidad duradera al coronavirus, incluso en aquellas personas que solo experimentan síntomas leves de COVID-19.
Una gran cantidad de estudios revelan que los anticuerpos que combaten enfermedades, así como las células B y las células T que pueden reconocer al virus, parecen persistir meses después de que las infecciones han seguido su curso, así lo dio a conocer el medio The New York Times.
«Esto es exactamente lo que uno esperaría. Todas las piezas están ahí para tener una respuesta inmune totalmente protectora», señaló Marion Pepper, inmunóloga de la Universidad de Washington y autora de uno de los nuevos estudios, que actualmente se encuentran bajo revisión para ser publicados en la revista Nature.
«Esto es muy prometedor», destacó Smita Iyer, inmunóloga de la Universidad de California en Davis, quien estudia las respuestas inmunes al coronavirus en macacos rhesus. «Esto requiere cierto optimismo sobre la inmunidad colectiva y, potencialmente, una vacuna».
Aunque los investigadores no pueden predecir cuánto tiempo durarán estas respuestas inmunes, los expertos consideran que los datos son la primera prueba de que el cuerpo tiene una buena posibilidad de defenderse contra el coronavirus si se expone a él nuevamente.
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«Las cosas realmente están funcionando como se supone que deben hacerlo», señaló Deepta Bhattacharya, inmunólogo de la Universidad de Arizona y autor de uno de los nuevos estudios publicados en medRxiv, servidor de preimpresión para la investigación de la salud.
Mientras los científicos se apresuran a encontrar una manera de alcanzar la inmunidad colectiva contra el coronavirus, el segundo distrito escolar más grande de Estados Unidos anunció un ambicioso programa de pruebas de COVID-19. De acuerdo con el Washington Post, el Distrito Unificado de Los Ángeles dijo que planea evaluar periódicamente a casi 700,000 estudiantes y a 75,000 empleados para tratar de determinar cuándo se pueden reanudar las clases presenciales de manera segura.
El distrito fue uno de los primeros en el país en anunciar que los estudiantes no regresarían a las aulas en este otoño. Trabajando con la Universidad de California en Los Ángeles, la Universidad Johns Hopkins, la Universidad de Stanford, Microsoft y las principales aseguradoras de salud, el distrito ahora construirá su propio sistema de prueba y rastreo de contactos para una población escolar que es más grande que muchas ciudades estadounidenses.
Los maestros que trabajan desde los edificios escolares serán los primeros en participar en el programa. Posteriormente, se administrarán pruebas a todos los demás miembros del personal y a los estudiantes para establecer una línea de base. El distrito también planea ofrecer pruebas a cualquier familiar de estudiantes o personal que muestre síntomas de coronavirus.
Vía: Health Day News
