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Hipertensión y CorazónHipertensión y Corazón

¿Qué son las enfermedades del corazón?

Las enfermedades del corazón son una de las principales causas de muerte, siendo la segunda causa de mortalidad en México. Entre ellas, las que destacan son la cardiopatía isquémica, que es la responsable de más de la mitad de las muertes en este grupo de padecimientos. Los eventos cardiovasculares representan también una causa importante de discapacidad.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), estas afecciones, como el infarto al miocardio y el infarto cerebral, cobran 17.5 millones de vidas al año en el mundo. Existen diversos tipos de enfermedades del corazón, siendo la causa más común el estrechamiento o bloqueo de las arterias coronarias y los vasos sanguíneos que suministran sangre al propio corazón.

Dicho estrechamiento suele presentarse debido a diferentes factores, entre ellos el desarrollo de presión arterial alta (hipertensión).

Síntomas

Los síntomas de un padecimiento cardiovascular pueden variar entre hombres y mujeres. En algunos casos, especialmente en mujeres con enfermedad coronaria, el padecimiento se puede presentar de manera asintomática. Por ello son importantes los chequeos médicos periódicos. A continuación te decimos algunos síntomas comunes y que pueden ser “focos rojos”, a los cuales debes prestarles atención:

  • Angina de pecho: clásicamente se presenta como un dolor opresivo en el pecho que aumenta con la actividad física y mejora con el reposo. Si el dolor se presenta en reposo y no cede después de unos minutos, suele indicar un cuadro más grave.
  • Irradiación: se suele irradiar el dolor al brazo izquierdo, espalda, cuello y/o mandíbula.
  • Síntomas clásicos acompañantes: se acompaña de falta de aire, sudoración fría, mareo, ganas de vomitar y/o evacuar.
  • Síntomas no-clásicos: dolor agudo y quemante en el pecho o boca del estómago (más frecuente en mujeres y pacientes con diabetes) o sensación de indigestión.
  • Insuficiencia cardíaca: se caracteriza por dificultad en la respiración y agotamiento, que se acentúan en caso de actividad vigorosa. También se puede presentar hinchazón en pies, tobillos, piernas, abdomen y venas del cuello.
  • Arritmia: Trastorno del ritmo cardíaco en donde el corazón puede latir de manera irregular, más rápidamente o más lentamente. La sensación que provoca es como de “aleteo” o “golpes” dentro del pecho, esto se conoce como palpitaciones.

Diagnóstico

Si el médico sospecha que hay algún padecimiento, puede pedir varias pruebas como electrocardiograma (ECG), ecocardiografía, radiografía de tórax, pruebas de sangre, tomografía computarizada por haz de electrones, angiografía coronaria y cateterismo cardíaco.

También puede ordenar una prueba de esfuerzo, en la cual se pueden hacer evidentes algunos signos y síntomas de enfermedad coronaria como alteraciones de la frecuencia cardíaca o de la presión arterial; falta de aliento o dolor en el pecho; y alteración del ritmo cardíaco.

Causas

La causa más común de enfermedades del corazón es el estrechamiento o bloqueo de las arterias coronarias y los vasos sanguíneos, los cuales suministran sangre al propio corazón.

Los factores de riesgo para desarrollarlas incluyen:

  • Edad. Envejecer aumenta el riesgo de sufrir deterioro en las arterias, pues se estrechan y el músculo cardíaco se debilita o crece.
  • Sexo. Los hombres son generalmente más propensos a padecer enfermedades del corazón. El riesgo de una mujer aumenta después de la menopausia.
  • Historia familiar. Aumenta el riesgo de enfermedad arterial coronaria, especialmente si uno de los padres la desarrolló a una edad temprana.
  • Fumar. La nicotina contrae los vasos sanguíneos, y el monóxido de carbono puede dañar el revestimiento interior, haciéndolos más susceptibles a la aterosclerosis. Los infartos son más comunes en los fumadores que en los no fumadores.
  • Presión arterial alta (hipertensión). La hipertensión contribuye a que las paredes de los vasos sanguíneos se hagan más gruesas. Si esto se combina con depósitos de colesterol en los vasos, puede causar problemas como derrames cerebrales, insuficiencia cardíaca e infarto.
  • Altos niveles de colesterol en la sangre. Pueden aumentar el riesgo de formación de placas y de aterosclerosis. Las placas pueden ser causadas ​​por un alto nivel de lipoproteína de baja densidad (LDL), conocido como colesterol «malo», o un nivel bajo de lipoproteína de alta densidad (HDL), conocido como colesterol » bueno».
  • Mala alimentación. Una dieta alta en grasas saturadas, sal y colesterol puede contribuir al desarrollo de enfermedades del corazón.
  • Diabetes. La diabetes aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas. Ambas enfermedades comparten factores de riesgo similares, como la obesidad y la hipertensión arterial.
  • Obesidad. El exceso de peso agrava otros factores de riesgo.
  • Inactividad física. La falta de ejercicio también está asociado con muchas formas de enfermedades del corazón y sus otros factores de riesgo.
  • Estrés. El estrés puede causar daño en las arterias, así como empeorar otros factores de riesgo.
  • Falta de higiene. No lavarse regularmente las manos y la falta de otros hábitos de higiene que pueden ayudar a prevenir las infecciones virales o bacterianas pueden ser un factor de riesgo de infecciones del corazón, especialmente si ya tienes una condición subyacente. La mala salud dental también puede contribuir a la enfermedad cardíaca.

Vía: Instituto Nacional del Corazón, Pulmones y la Sangre de EU; Servicio Nacional de Salud del Reino Unido; Clínica Mayo; Mediline Plus

Prevención

Aunque no se pueden cambiar factores como los antecedentes familiares, un cambio de estilo de vida puede ayudar a evitar estos padecimientos.

Los pasos clave para prevenir las enfermedades cardíacas son:

1. Evita fumar y consumir tabaco. Algunas sustancias químicas que contienen los cigarros como el alquitrán y el monóxido de carbono pueden dañar los vasos sanguíneos, dado que provocan la acumulación de grasa en las arterias (ateroesclerosis).

2. Haz ejercicio diariamente durante 30 minutos. Es importante ejercitarse regularmente, hacerlo todos los días podría reducir el riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca fatal. La actividad física ayuda a controlar tu peso y a reducir las probabilidades de otras afecciones que pueden poner en peligro tu corazón, como hipertensión, colesterol alto y diabetes. El ejercicio también ayuda reducir el estrés, el cual puede ser un factor de riesgo de enfermedades cardíacas.

3. Lleva una dieta saludable. Consume alimentos bajos en grasa, colesterol y sal. Las dietas ricas en frutas, verduras, granos integrales y productos lácteos bajos en grasa son lo más recomendable. Los frijoles y otras fuentes de proteínas bajas en grasa, como el pescado, también reducen el riesgo de enfermedades del corazón.

También procura beber alcohol con moderación. En un nivel moderado, el alcohol puede tener un efecto protector sobre el corazón (vino tinto); aunque se debe tener cuidado si se tiene predisposición al alcohol. Beber en exceso se convierte en un peligro para la salud.

4. Mantén un peso saludable. Cuando se aumenta de peso en la edad adulta, el peso adquirido es principalmente grasa y no músculo. Este exceso de peso puede aumentar las posibilidades de desarrollar enfermedades del corazón, presión arterial alta, colesterol alto y/o diabetes.

5. Realízate pruebas regularmente y mide tu presión. La presión arterial alta así como el colesterol alto dañan el corazón y los vasos sanguíneos. Pero sin la prueba para detectarlos, es probable que no sepas si tienes estas condiciones. La revisión regular te marcará la pauta para tomar las medidas necesarias.

Vía: Instituto Nacional del Corazón, Pulmones y la Sangre de EU; Servicio Nacional de Salud del Reino Unido; Clínica Mayo

Tratamiento

El tratamiento para la enfermedad cardíaca suele ser el mismo para hombres y mujeres.

Puede incluir cambios de estilo de vida, hábitos saludables, medicamentos, procedimientos médicos y quirúrgicos y de rehabilitación cardíaca.

Los objetivos del tratamiento son:

  • Aliviar los síntomas.
  • Reducir los factores de riesgo para frenar, detener o revertir el daño.
  • Reducir el riesgo de formación de coágulos sanguíneos, que pueden ser la causa de un ataque cardíaco.
  • Ampliar o desviar las arterias coronarias obstruidas.
  • Prevenir las complicaciones de cardiopatía coronaria.

Medicamentos

Si los cambios de estilo de vida no son suficientes, puedes necesitar medicamentos para tratar las enfermedades cardíacas. Estos ayudan a:

  • Reducir la carga de trabajo del corazón y aliviar los síntomas de la enfermedad.
  • Disminuir el riesgo de tener un ataque cardíaco o muerte súbita.
  • Bajar el colesterol, la presión arterial y otros factores de riesgo de cardiopatía coronaria.
  • Evitar los coágulos sanguíneos.
  • Prevenir o retrasar la necesidad de un procedimiento o cirugía, como la angioplastía o la cirugía de revascularización coronaria.

Procedimientos y cirugía

Es posible que necesites un procedimiento o una cirugía para tratar la enfermedad coronaria. Tanto la angioplastía (procedimiento no quirúrgico que abre las arterias coronarias bloqueadas o estrechas) como la cirugía de revascularización coronaria (cirugía en la que se extirpan las arterias o venas de otras partes del cuerpo y las utilizan para reemplazar la que está bloqueada) se utilizan como tratamientos.

Asimismo, la rehabilitación cardíaca a veces es recomendada por el médico cuando se ha realizado una angioplastía o una derivación coronaria, también cuando se ha sufrido un ataque al corazón.

Preguntas
frecuentes

  1. ¿Qué es la hipertensión?

La hipertensión es el término que se utiliza para describir la presión arterial alta. Este padecimiento, la mayoría de las veces, se puede controlar mediante medicamentos y algunos cambios en el estilo de vida. Es importante consultar con el médico toda decisión relativa a la hipertensión y establecer junto con él los rangos adecuados en los que debes mantenerte.

  1. ¿Qué ocurre cuando se revisa la presión arterial?

Se mide lapresión sistólica (es la presión de la sangre cuando el corazón se contrae al bombearla) y ladiastólica (que es la presión de la sangre cuando el corazón descansa entre latidos). Por ello, en la lectura se dan dos números.

  1. ¿Cuáles son los niveles normales de presión arterial?

Una presión normal es, regularmente, menor a 120/80 mmHg y una alta es de 140/90 mmHg o más.
A través del tratamiento (que en ocasiones puede incluir más de dos medicamentos) se buscará reducir la presión arterial y, de esa forma, evitar complicaciones, razón por la cual se deben administrar de la manera en que te indicó tu médico.

  1. ¿Qué factores aumentan mi riesgo de padecer hipertensión?

La obesidad aumenta los riesgos de padecerhipertensión, por lo que debes mantenerte con un buen estado físico y bajar de peso si es necesario. Asimismo, es indispensable reducir el estrés e incluso se aconseja realizar actividades que ayuden a sacar el estrés, como bailar, meditar o hacer yoga.

  1. ¿Cada cuándo debo revisar mi presión arterial?

Revisa tu presión arterial al menos una vez al año. Si tienes predisposición a la hipertensión o padeces diabetes, cardiopatía o problemas renales, se recomienda revisar tu presión con mayor frecuencia. Si sueles tomarte la presión en casa y el monitoreo muestra presión alta, no dejes pasar el tiempo y llama inmediatamente a tu doctor.

  1. ¿Qué complicaciones puedo desarrollar si tengo una presión mal controlada?

Debido a que la mayoría de las veces esta enfermedad no presenta síntomas (pues se detecta normalmente cuando se va al médico), las personas pueden desarrollar algunas complicaciones sin saber que tienen hipertensión. Los problemas que se pueden presentar debido a la presión mal controlada incluyen derrames cerebrales, ataques cardíacos, insuficiencia cardíaca y padecimientos renales.
También es muy importante que estés atento a tu presión arterial si tienes antecedentes familiares.

Vía: Instituto Nacional del Corazón, Pulmones y la Sangre de los Estados Unidos; Medline Plus

Los síntomas de un padecimiento cardiovascular pueden variar entre hombres y mujeres. En algunos casos, especialmente en mujeres con enfermedad coronaria, el padecimiento se puede presentar de manera asintomática. Por ello son importantes los chequeos médicos periódicos. A continuación te decimos algunos síntomas comunes y que pueden ser “focos rojos”, a los cuales debes prestarles atención:

  • Angina de pecho: clásicamente se presenta como un dolor opresivo en el pecho que aumenta con la actividad física y mejora con el reposo. Si el dolor se presenta en reposo y no cede después de unos minutos, suele indicar un cuadro más grave.
  • Irradiación: se suele irradiar el dolor al brazo izquierdo, espalda, cuello y/o mandíbula.
  • Síntomas clásicos acompañantes: se acompaña de falta de aire, sudoración fría, mareo, ganas de vomitar y/o evacuar.
  • Síntomas no-clásicos: dolor agudo y quemante en el pecho o boca del estómago (más frecuente en mujeres y pacientes con diabetes) o sensación de indigestión.
  • Insuficiencia cardíaca: se caracteriza por dificultad en la respiración y agotamiento, que se acentúan en caso de actividad vigorosa. También se puede presentar hinchazón en pies, tobillos, piernas, abdomen y venas del cuello.
  • Arritmia: Trastorno del ritmo cardíaco en donde el corazón puede latir de manera irregular, más rápidamente o más lentamente. La sensación que provoca es como de “aleteo” o “golpes” dentro del pecho, esto se conoce como palpitaciones.

Si el médico sospecha que hay algún padecimiento, puede pedir varias pruebas como electrocardiograma (ECG), ecocardiografía, radiografía de tórax, pruebas de sangre, tomografía computarizada por haz de electrones, angiografía coronaria y cateterismo cardíaco.

También puede ordenar una prueba de esfuerzo, en la cual se pueden hacer evidentes algunos signos y síntomas de enfermedad coronaria como alteraciones de la frecuencia cardíaca o de la presión arterial; falta de aliento o dolor en el pecho; y alteración del ritmo cardíaco.

La causa más común de enfermedades del corazón es el estrechamiento o bloqueo de las arterias coronarias y los vasos sanguíneos, los cuales suministran sangre al propio corazón.

Los factores de riesgo para desarrollarlas incluyen:

  • Edad. Envejecer aumenta el riesgo de sufrir deterioro en las arterias, pues se estrechan y el músculo cardíaco se debilita o crece.
  • Sexo. Los hombres son generalmente más propensos a padecer enfermedades del corazón. El riesgo de una mujer aumenta después de la menopausia.
  • Historia familiar. Aumenta el riesgo de enfermedad arterial coronaria, especialmente si uno de los padres la desarrolló a una edad temprana.
  • Fumar. La nicotina contrae los vasos sanguíneos, y el monóxido de carbono puede dañar el revestimiento interior, haciéndolos más susceptibles a la aterosclerosis. Los infartos son más comunes en los fumadores que en los no fumadores.
  • Presión arterial alta (hipertensión). La hipertensión contribuye a que las paredes de los vasos sanguíneos se hagan más gruesas. Si esto se combina con depósitos de colesterol en los vasos, puede causar problemas como derrames cerebrales, insuficiencia cardíaca e infarto.
  • Altos niveles de colesterol en la sangre. Pueden aumentar el riesgo de formación de placas y de aterosclerosis. Las placas pueden ser causadas ​​por un alto nivel de lipoproteína de baja densidad (LDL), conocido como colesterol «malo», o un nivel bajo de lipoproteína de alta densidad (HDL), conocido como colesterol » bueno».
  • Mala alimentación. Una dieta alta en grasas saturadas, sal y colesterol puede contribuir al desarrollo de enfermedades del corazón.
  • Diabetes. La diabetes aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas. Ambas enfermedades comparten factores de riesgo similares, como la obesidad y la hipertensión arterial.
  • Obesidad. El exceso de peso agrava otros factores de riesgo.
  • Inactividad física. La falta de ejercicio también está asociado con muchas formas de enfermedades del corazón y sus otros factores de riesgo.
  • Estrés. El estrés puede causar daño en las arterias, así como empeorar otros factores de riesgo.
  • Falta de higiene. No lavarse regularmente las manos y la falta de otros hábitos de higiene que pueden ayudar a prevenir las infecciones virales o bacterianas pueden ser un factor de riesgo de infecciones del corazón, especialmente si ya tienes una condición subyacente. La mala salud dental también puede contribuir a la enfermedad cardíaca.

Vía: Instituto Nacional del Corazón, Pulmones y la Sangre de EU; Servicio Nacional de Salud del Reino Unido; Clínica Mayo; Mediline Plus

Aunque no se pueden cambiar factores como los antecedentes familiares, un cambio de estilo de vida puede ayudar a evitar estos padecimientos.

Los pasos clave para prevenir las enfermedades cardíacas son:

1. Evita fumar y consumir tabaco. Algunas sustancias químicas que contienen los cigarros como el alquitrán y el monóxido de carbono pueden dañar los vasos sanguíneos, dado que provocan la acumulación de grasa en las arterias (ateroesclerosis).

2. Haz ejercicio diariamente durante 30 minutos. Es importante ejercitarse regularmente, hacerlo todos los días podría reducir el riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca fatal. La actividad física ayuda a controlar tu peso y a reducir las probabilidades de otras afecciones que pueden poner en peligro tu corazón, como hipertensión, colesterol alto y diabetes. El ejercicio también ayuda reducir el estrés, el cual puede ser un factor de riesgo de enfermedades cardíacas.

3. Lleva una dieta saludable. Consume alimentos bajos en grasa, colesterol y sal. Las dietas ricas en frutas, verduras, granos integrales y productos lácteos bajos en grasa son lo más recomendable. Los frijoles y otras fuentes de proteínas bajas en grasa, como el pescado, también reducen el riesgo de enfermedades del corazón.

También procura beber alcohol con moderación. En un nivel moderado, el alcohol puede tener un efecto protector sobre el corazón (vino tinto); aunque se debe tener cuidado si se tiene predisposición al alcohol. Beber en exceso se convierte en un peligro para la salud.

4. Mantén un peso saludable. Cuando se aumenta de peso en la edad adulta, el peso adquirido es principalmente grasa y no músculo. Este exceso de peso puede aumentar las posibilidades de desarrollar enfermedades del corazón, presión arterial alta, colesterol alto y/o diabetes.

5. Realízate pruebas regularmente y mide tu presión. La presión arterial alta así como el colesterol alto dañan el corazón y los vasos sanguíneos. Pero sin la prueba para detectarlos, es probable que no sepas si tienes estas condiciones. La revisión regular te marcará la pauta para tomar las medidas necesarias.

Vía: Instituto Nacional del Corazón, Pulmones y la Sangre de EU; Servicio Nacional de Salud del Reino Unido; Clínica Mayo

El tratamiento para la enfermedad cardíaca suele ser el mismo para hombres y mujeres.

Puede incluir cambios de estilo de vida, hábitos saludables, medicamentos, procedimientos médicos y quirúrgicos y de rehabilitación cardíaca.

Los objetivos del tratamiento son:

  • Aliviar los síntomas.
  • Reducir los factores de riesgo para frenar, detener o revertir el daño.
  • Reducir el riesgo de formación de coágulos sanguíneos, que pueden ser la causa de un ataque cardíaco.
  • Ampliar o desviar las arterias coronarias obstruidas.
  • Prevenir las complicaciones de cardiopatía coronaria.

Medicamentos

Si los cambios de estilo de vida no son suficientes, puedes necesitar medicamentos para tratar las enfermedades cardíacas. Estos ayudan a:

  • Reducir la carga de trabajo del corazón y aliviar los síntomas de la enfermedad.
  • Disminuir el riesgo de tener un ataque cardíaco o muerte súbita.
  • Bajar el colesterol, la presión arterial y otros factores de riesgo de cardiopatía coronaria.
  • Evitar los coágulos sanguíneos.
  • Prevenir o retrasar la necesidad de un procedimiento o cirugía, como la angioplastía o la cirugía de revascularización coronaria.

Procedimientos y cirugía

Es posible que necesites un procedimiento o una cirugía para tratar la enfermedad coronaria. Tanto la angioplastía (procedimiento no quirúrgico que abre las arterias coronarias bloqueadas o estrechas) como la cirugía de revascularización coronaria (cirugía en la que se extirpan las arterias o venas de otras partes del cuerpo y las utilizan para reemplazar la que está bloqueada) se utilizan como tratamientos.

Asimismo, la rehabilitación cardíaca a veces es recomendada por el médico cuando se ha realizado una angioplastía o una derivación coronaria, también cuando se ha sufrido un ataque al corazón.

  1. ¿Qué es la hipertensión?

La hipertensión es el término que se utiliza para describir la presión arterial alta. Este padecimiento, la mayoría de las veces, se puede controlar mediante medicamentos y algunos cambios en el estilo de vida. Es importante consultar con el médico toda decisión relativa a la hipertensión y establecer junto con él los rangos adecuados en los que debes mantenerte.

  1. ¿Qué ocurre cuando se revisa la presión arterial?

Se mide lapresión sistólica (es la presión de la sangre cuando el corazón se contrae al bombearla) y ladiastólica (que es la presión de la sangre cuando el corazón descansa entre latidos). Por ello, en la lectura se dan dos números.

  1. ¿Cuáles son los niveles normales de presión arterial?

Una presión normal es, regularmente, menor a 120/80 mmHg y una alta es de 140/90 mmHg o más.
A través del tratamiento (que en ocasiones puede incluir más de dos medicamentos) se buscará reducir la presión arterial y, de esa forma, evitar complicaciones, razón por la cual se deben administrar de la manera en que te indicó tu médico.

  1. ¿Qué factores aumentan mi riesgo de padecer hipertensión?

La obesidad aumenta los riesgos de padecerhipertensión, por lo que debes mantenerte con un buen estado físico y bajar de peso si es necesario. Asimismo, es indispensable reducir el estrés e incluso se aconseja realizar actividades que ayuden a sacar el estrés, como bailar, meditar o hacer yoga.

  1. ¿Cada cuándo debo revisar mi presión arterial?

Revisa tu presión arterial al menos una vez al año. Si tienes predisposición a la hipertensión o padeces diabetes, cardiopatía o problemas renales, se recomienda revisar tu presión con mayor frecuencia. Si sueles tomarte la presión en casa y el monitoreo muestra presión alta, no dejes pasar el tiempo y llama inmediatamente a tu doctor.

  1. ¿Qué complicaciones puedo desarrollar si tengo una presión mal controlada?

Debido a que la mayoría de las veces esta enfermedad no presenta síntomas (pues se detecta normalmente cuando se va al médico), las personas pueden desarrollar algunas complicaciones sin saber que tienen hipertensión. Los problemas que se pueden presentar debido a la presión mal controlada incluyen derrames cerebrales, ataques cardíacos, insuficiencia cardíaca y padecimientos renales.
También es muy importante que estés atento a tu presión arterial si tienes antecedentes familiares.

Vía: Instituto Nacional del Corazón, Pulmones y la Sangre de los Estados Unidos; Medline Plus

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