La caída de las hojas de los árboles es un signo notorio de que llegamos al otoño. Y también lo son los ataques de asma, los cuales tienden a aumentar a principios de esta época del año.
Durante la pandemia de coronavirus, es especialmente importante que las personas con esta enfermedad sepan cómo prevenir los brotes, así lo indica el doctor Pushan Jani, profesor asistente de medicina pulmonar y de cuidados intensivos en el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas, en Houston (Estados Unidos).
«Existen dos tipos diferentes de brotes de asma», señaló el experto.
«Primero, están los que padecen asma durante todo el año, y luego hay algunas personas que tienen asma estacional, que es provocada por diferentes alérgenos y polen en el aire. En esta época del año aumentan los ataques de asma estacional y pueden empeorar el manejo de quienes padecen asma persistente», detalló.
Cada otoño, Jani y otros especialistas de su área observan un aumento significativo en las hospitalizaciones relacionadas con el asma debido a que varios tipos de polen, como los provenientes de la ambrosía y el moho, llenan el aire.
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La combinación de la pandemia de COVID-19, el comienzo de la temporada de gripe y los altos niveles de polen significan que las personas con asma deben protegerse para no terminar en el hospital.
Es fundamental abastecerse de los medicamentos o inhaladores necesarios para controlar los brotes, aconsejó Jani.
También recomendó hacerse una prueba de alergia. «Si no sabes qué desencadena estos ataques, hazte la prueba. Esto te ayudará a identificar lo que debes buscar para evitar un gran ataque y una posible hospitalización», mencionó.
Monitorea los canales meteorológicos locales o el Índice de calidad del aire (ICA) para conocer los recuentos de polen. «Si sabes qué tipo de polen desencadena tu asma, mantente al día con los canales y aplicaciones meteorológicos que pueden ayudarte a determinar si debes salir o no. Si la calidad del aire no es saludable para poblaciones vulnerables (101-150), las autoridades piden que los pacientes con asma reduzcan o limiten el tiempo que pasan trabajando o realizando actividades al aire libre», recomendó Jani.
Asimismo, es importante conocer los primeros síntomas de un ataque de asma: falta de aire severa, tos excesiva, dificultad para hablar y opresión en el pecho.
«Idealmente, nos gustaría que los pacientes tuvieran un buen control de su asma durante todo el año. Estamos entrando en un período en el que vemos un aumento en los casos relacionados con el asma y todavía estamos en medio de una pandemia. Ahora más que nunca, esperamos que los pacientes comprendan por qué es especialmente importante tener estos desencadenantes bajo control para evitar visitas al hospital», enfatizó el especialista.
Vía: Health Day News
