La temporada de frío esta aquí, razón por la que es importante protegernos para prevenir problemas de salud. Antes de que tú o tus hijos salgan al aire frío, recuerda este consejo, recuerda seguir cuatro pasos clave: protégete, no hagas demasiada actividad física, usa varias capas de ropa y mantente seco.
- Protégete. Usa un sombrero u otra protección para evitar que el calor corporal escape por la cabeza, la cara o el cuello. Protégete las manos con guantes sin separación para los dedos, en vez de guantes tradicionales.
- Evita hacer mucha actividad física. La combinación de ropa húmeda y clima frío puede causar que pierdas calor corporal más rápido.
- Usa varias capas de ropa. La ropa exterior hecha de material con tejido firme y repelente al agua es mejor para protegerte del viento. Los recubrimientos de lana, seda o polipropileno mantienen el calor corporal mejor que el algodón.
- Mantente seco. Si llueve, quítate la ropa húmeda lo más pronto posible. Ten especial cuidado de mantener secos las manos y los pies porque es muy fácil que te entre agua en los guantes y las botas.
Para ayudar a evitar la hipotermia cuando los niños están a la intemperie en invierno:
- Viste a los bebés y niños pequeños con una capa de ropa más que lo que un adulto usaría.
- Haz que los niños entren de manera frecuente para que se calienten cuando estén jugando afuera.
- No dejes que los bebés duerman en una habitación fría.
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¡Cuídate!
Considera que el descenso en la temperatura corporal provoca que el corazón, el sistema nervioso y otros órganos no funcionen normalmente. Si la hipotermia no se trata, con el tiempo, puede provocar que el corazón y el sistema respiratorio dejen de funcionar y, finalmente, la muerte.
La causa más frecuente de la hipotermia es la exposición al clima frío o la inmersión en agua fría. Los tratamientos principales para la hipotermia son métodos para calentar el cuerpo a fin de que recupere la temperatura normal.
Vía: Mayo Clinic
