Estar envuelto en una manta con peso quizás parezca algo trivial, pero podría ayudar a relajar tu mente y tu cuerpo. Si bien la ciencia no ha demostrado la capacidad de las mantas pesadas para resolver los problemas de sueño, algunos estudios han revelado su impacto. Una pequeña investigación encontró que el 63 por ciento de los sujetos experimentaron menos ansiedad después de usar una manta con peso, mientras que el 78 por ciento dijo que esta funcionó como un agente calmante.
¿Qué es una manta con peso?
Una manta con peso es una cobija o manta que pesa entre 4 y 14 kilos, que está rellena con bolitas de plástico y tiene como fin dar la sensación de un abrazo cálido. Se cree que esta teoría, también conocida como terapia de presión profunda, causa un cambio en tu sistema nervioso y crea una sensación más relajante y de alivio en todo el cuerpo.
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«Las mantas pesadas se han convertido en una popular ayuda para dormir porque le permiten al cuerpo producir endorfinas u ‘hormonas felices’, que a su vez hacen que te sientas cómodo(a) y seguro(a)», señaló Adrian Pristas, director médico corporativo de los Centros de Medicina del Sueño en Hackensack Meridian Health (Estados Unidos). «Además, los químicos cerebrales melatonina y serotonina aumentan y brindan una sensación de calma y paz mientras duermes».
Cómo elegir una manta con peso
- Elige un peso que sea cómodo para tu tamaño corporal.
- Considera el tamaño de tu cama al seleccionar una manta.
- Elige un material que aporte el nivel de temperatura que desees (es decir, algodón frente a poliéster).
- Encuentra una manta que se ajuste a tu presupuesto. Los precios varían mucho, pero las mantas están cada vez más disponibles en todo tipo de tiendas minoristas.
NOTA IMPORTANTE: Si tienes una afección circulatoria como diabetes o presión arterial alta, habla con tu médico antes de usar una manta con peso.