Si necesitas un poco de inspiración, la próxima vez que salgas a caminar, procura observar las cosas que provocan una sensación de maravilla o asombro, pues un estudio pequeño publicado en septiembre de este año por la revista Emotion, descubrió que las personas que realizaban lo que los autores denominaron «caminatas de asombro» reportaban menos angustia y un aumento del asombro, la alegría, la compasión y la gratitud, en comparación con aquellas que realizaban caminatas regulares.
Para la investigación, se reclutó a un grupo de 50 adultos mayores. De ellos, la mitad realizó caminatas semanales de 15 minutos al aire libre (a solas) durante ocho semanas y se tomaron «selfies» en el camino. La otra mitad hizo los mismos paseos y selfies, pero visitó un lugar nuevo cada vez. Además, se les pidió que tomaran nota de las cosas que inspiraban una sensación de asombro, como los colores de los árboles o las hojas bajo los pies suavizadas por la lluvia. Los participantes también respondieron encuestas sobre las emociones que sentían durante los días de caminata y no caminata.
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Cabe destacar que los participantes que hicieron «caminatas de asombro» sonrieron más y se hicieron más pequeños en sus fotos, centrándose más en los paisajes, una señal de que tienen una mayor apreciación del mundo que los rodea.
Ahora que sabes esto, ¿por qué no lo pruebas por ti mismo(a)? Cuando hagas tu próxima caminata, imagina que estás viendo ese paisaje por primera vez. ¿Qué te inspirará? Quizás un camino bordeado de árboles, la orilla de un lago o una mirada de cerca a los rascacielos; y mejor aún, camina por lugares a donde jamás hayas ido. Anota tus observaciones y ve si sientes una sensación de asombro y alegría; si es así, estarás cosechando los beneficios para tu salud mental de esta actividad.
