Parece ser que los científicos acaban de demostrar que nuestras mamás tenían razón: las probabilidades de evitar un resfriado mejoran sustancialmente si nos abrigamos y mantenemos calientes.
Tener una temperatura corporal más cálida parece ayudar a prevenir que el virus del resfriado se propague, de múltiples maneras, aseguraron investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale.
Para el estudio, un equipo dirigido por la profesora de inmunología Akiko Iwasaki examinó las células de las vías respiratorias humanas. Estas células producen proteínas del sistema inmune esenciales llamadas interferones, que responden al virus del resfriado.
Las células fueron infectadas con el virus en un laboratorio e incubadas tanto a una temperatura corporal base de 98.6 grados Fahrenheit (37 grados Celsius), como a una temperatura más fría de 91.4 grados Fahrenheit (33 grados Celsius).
Usando modelos matemáticos, los investigadores descubrieron que cuando las células infectadas fueron expuestas a temperaturas corporales base sanas, el virus murió de forma más rápida y no fue capaz de replicarse.
Conoce más: 5 consejos para tratar el resfriado de tu hijo(a)
Asimismo, las temperaturas corporales más cálidas también parecieron ayudar en otro ámbito. El grupo de Iwasaki informó que la actividad de una enzima llamada RNAsel —que ataca y destruye genes virales— también mejoró a temperaturas más altas.
El nuevo trabajo se suma a la investigación previa realizada por este grupo de Yale. En el nuevo estudio, llevado a cabo en ratones, el grupo de Iwasaki halló que a varios grados por debajo de la temperatura corporal base, los interferones que combaten el virus tenían una menor capacidad para realizar su trabajo.
Las temperaturas más bajas también facilitaron que el virus del resfriado se propagara en las células de las vías respiratorias de los roedores, citaron los científicos.
Todas estas investigaciones en conjunto sugieren que «ahora existen tres vías [inmunológicas] orientadas al virus», destacó Iwasaki.
Cada una de las vías influye en la capacidad del sistema inmunológico para combatir el virus causante del resfriado común. Iwasaki y su equipo creen que los resultados podrían brindar nuevas estrategias para los investigadores que trabajan en el desarrollo de tratamientos contra la molesta enfermedad.
El estudio fue publicado hoy en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
Vía: HealthDay News