La clave para inspirar el amor por la actividad física desde una edad temprana es concentrarse en divertirse. Al igual que los adultos, es menos probable que los niños se entusiasmen con algo que no disfrutan. Además, si se divierten, probablemente querrán más, lo que les dará tiempo para practicar habilidades y mejorar las que ya tienen.
“Cada niño es único, y algunos gravitan hacia el ejercicio y la actividad física más que otros”, así lo señala John Gallucci Jr., CEO de JAG-ONE Physical Therapy.
Por lo anterior, es fundamental encontrar actividades que le gusten a tu hijo(a) y convertirlas en actividades que le animen a moverse más. “Los niños, especialmente los niños pequeños, no deben sentir que el ejercicio es una tarea”, subraya Gallucci.
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A medida que los niños crecen y se involucran más en los deportes organizados, ten en cuenta que a algunos les encantan los deportes estructurados y las competencias, pero a muchos otros no. Mantén una definición más amplia de movimiento que incluya caminatas con la familia, bailar en la sala de estar, escalar árboles, realizar yoga o cualquier otra cosa que disfruten.
Hacer que los niños se interesen en el movimiento y la actividad física a una edad temprana aumenta la probabilidad de que obtengan todos sus beneficios antes, y es probable que su interés en el ejercicio continúe incrementándose conforme vayan creciendo.
Fuente: Healthline
