Para ayudar a un ser querido a recibir tratamiento debido a un trastorno por consumo de alcohol, es necesario elaborar un plan. Un profesional de la salud que tenga capacitación especial para realizar intervenciones (especialista en intervenciones) con personas que padecen dicho trastorno puede ayudarte a concretar dicha planificación.
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El plan debe incluir:
- Cuándo hablarás con la persona. No lo intentes cuando esté borracho(a). Por lo general, el mejor momento para hablar con una persona que padece trastorno por consumo de alcohol es justo después de un episodio de bebida o a primera hora de la mañana, antes de que la persona haya tomado una copa.
- Dónde hablarás. Decide la ubicación y cómo llevarás a la persona ahí.
- Cuánto tiempo vas a hablar. Decide cuánto tiempo vas a hablar con la persona. Si hablas más de 60 minutos, es posible que tú y la persona se sientan frustrados, lo que hará que la reunión sea menos útil.
- Quién hablará con la persona. Las posibilidades pueden incluir a familiares, compañeros de trabajo y amigos.
- Si contarás con un profesional de la salud presente. Si planeas una intervención formal, es más probable que tengas éxito si hay un especialista en intervención.
- Qué se dirá. Querrás decirle a la persona cómo le ha afectado su forma de beber. Sé específico(a) sobre su comportamiento. Por ejemplo, puedes decir «Cuando tu [comportamiento específico], yo siento [sentimiento]». También querrás decirle a la persona que no estás dispuesto(a) a continuar la relación a menos que reciba tratamiento. Dile lo que vas a hacer. Por ejemplo, «Lo haré …» o «Ya no lo haré …». Puedes escribir lo que dirás para poder practicar varias veces.
- Dónde llevarás a la persona para su tratamiento. Habla con el centro de tratamiento y haz los arreglos con anticipación.
