El estrés laboral ha golpeado por décadas el universo profesional e íntimo de todos los individuos, sin importar sexo u ocupación. Actualmente, encarna un problema social que sacude a la mayoría de los países del mundo y daña la salud, el desempeño y la productividad de los trabajadores.
Transformar la percepción que existe sobre el empleo es una prioridad. Considerar que, más que una obligación diaria, representa una faena que puede disfrutarse si se erradican ciertos hábitos negativos.
Cambia tu rutina diaria y evita las siguientes prácticas:
• Despertarse tarde. Ir contra reloj a la oficina puede ser agobiante, sobre todo si el camino es largo. Intenta salir con tiempo de casa.
• Saltarse el desayuno. La primera comida es clave para iniciar bien el día. Trabajar con el estomago vacío puede generar mal humor y estrés.
• Desorganización de las tareas diarias. Realizar un análisis de las tareas a cumplir es benéfico para establecer horarios. Es importante estar preparado para que el tiempo en la oficina resulte suficiente.
• Ignorar prioridades. Esta acción es un factor determinante para dejar inconclusas las tareas más importantes del día.
• Cargar con todas las responsabilidades. Recibir ayuda y delegar trabajo, en medida de lo posible, resulta benéfico para liberar estrés. Sobrecargarse podría dañar la salud
• Trabajar en un sitio desordenado. El orden influye en la estabilidad mental, así como en la productividad ¡Aplícalo en tu día a día!
• No descansar. Es recomendable relajarse un poco y despejar la mente cada dos horas. Apártate del escritorio por cinco minutos.
• Distracciones constantes. Si se utiliza el tiempo en la oficina para realizar las tareas establecidas podrás entregar el trabajo en tiempo y forma. Evita aquellas cosas o personas que roben tu atención.
• No hidratarse. Así como comer, beber líquidos es favorable para mantener la mente despejada y estar alertas. Vivir deshidratado afectará tu productividad tanto como el estrés.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), México es el país con mayor porcentaje de estrés vinculado al trabajo, con 75% de personas afectadas —seguido de China con 73% y Estados Unidos con 59%—.
De los 75 mil infartos registrados al año en el país, 25% son provocados por estrés laboral, cifra alarmante si se considera la falta de medidas preventivas.
El exceso o escasez de trabajo, horarios inflexibles, inseguridad laboral, malas relaciones con los compañeros y la falta de apoyo por parte de la familia, son las principales causas de este padecimiento, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la OMS.
Vía: Notimex