Los gérmenes que provocan enfermedades comunes, como infecciones de oído y faringitis estreptocócica, pueden permanecer en superficies como cunas, juguetes y libros durante horas después de haber sucedido el contacto. Incluso, señala un nuevo estudio, si éstas han sido limpiadas.
Los investigadores sugieren que por esta razón son necesaria medidas adicionales para proteger a niños y adultos del Streptococcus pneumoniae y del Streptococcus pyogenes, particularmente en entornos como la escuela, guarderías y hospitales.
“Estos descubrimientos deberían hacernos más cuidadosos sobre las bacterias en el ambiente, ya que cambian nuestra idea de cómo estas bacterias en particular se esparcen”, señala Anders Hakansson de la Universidad de Buffalo y autor principal del estudio.
Según señala Hakansson, profesor asistente de Microbiología e Inmunología en la Escuela de Medicina y Ciencias Biomédicas de la Universidad de Buffalo, se trata del primer trabajo que investiga directamente que estas bacterias pueden sobrevivir en varias superficies, “incluyendo las manos y potencialmente se pueden esparcir entre individuos”.
El año pasado, investigadores de la Universidad de Buffalo encontraron que algunas bacterias pueden formar “biopelículas” al infectar tejidos humanos y permanecer en algunas superficies por extensos periodos de tiempo. Estas “películas” bacteriales son una estructura sofisticada que resulta más resistente que otros tipos de bacterias.
En un estudio reciente publicado el pasado 26 de diciembre, los investigadores señalan que en la guardería que examinaron, cuatro de cada cinco juguetes de peluche estaban contaminados con S. pneumoniae, el cual provoca infecciones en el oído de los niños. Este germen también puede causar infecciones respiratorias delicadas tanto en niños como en gente mayor, de acuerdo con un comunicado publicado por la institución.
Además, diversas superficies -incluyendo cunas que habían sido limpiadas- estaban contaminadas con S. pyogenes, una bacteria que comúnmente provoca faringitis e infecciones en la piel en niños en edad escolar y puede causar infecciones serias en adultos.
La inspección se realizó en la mañana antes de que abrieran las instalaciones, habiendo pasado varias horas desde que alguien hubiese estado en ellas, apuntan los investigadores.
Estudios anteriores han demostrado que las bacterias en superficies y objetos mueren rápidamente, pero los investigadores señalan que se ha tratado de observaciones basadas en cultivos de laboratorio.
En el estudio más reciente, biopelículas de S. pneumoniae y S. pyogenes que habían permanecido en una superficie durante un mes contaminaron rápidamente a ratones en un laboratorio. También se encontró que las biopelículas pueden sobrevivir por horas en las manos de la gente y permanecer por horas en libros y en las superficie de juguetes, tanto blandos como duros.
“En todos los casos, encontramos que estos patógenos pueden sobrevivir por largos periodos fuera de un anfitrión humano”, apunta Hakansson. “Comúnmente los objetos que están contaminados con estas biopelículas pueden actuar como reservorios de bacterias durante horas, semanas o meses, esparciendo infecciones potenciales a los individuos que entran en contacto con ellas”.
Si bien el estudio encontró dos tipos de bacterias que permanecieron en las superficies de la guardaría, no se encontró ningún caso de infección entre los humanos. Queda por investigar, cuánto contacto con estas superficies se requiere para esparcir los gérmenes entre los humanos, qué tan sustancial es esta propagación, y qué tipo de métodos de prevención se requieren para la gente que que trabaja con niños y en en entornes de servicios de salud, subrayan los autores del estudio.
Vía: HealthDay News