Leer las etiquetas de nutrición puede ayudarte a tomar decisiones más informadas y saludables. Aquí tienes cinco consejos esenciales para interpretar correctamente la información nutricional.
1. Revisa el tamaño de la porción
El tamaño de la porción es clave, ya que toda la información nutricional se basa en esa cantidad específica. Si consumes más de lo indicado, debes multiplicar las calorías y nutrientes por el número de porciones ingeridas.
2. Prioriza los nutrientes clave
Busca alimentos altos en nutrientes beneficiosos como fibra, proteínas, vitaminas y minerales. A la vez, intenta limitar grasas saturadas, grasas trans, sodio y azúcares añadidos.
3. Presta atención a las calorías
Las calorías por porción indican cuánta energía obtendrás del alimento. Aunque las calorías son importantes, enfócate también en la calidad de los nutrientes que las acompañan.
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4. Conoce el porcentaje de valor diario (%VD)
El %VD indica cuánto de cada nutriente aporta el alimento respecto a las necesidades diarias, basadas en una dieta promedio de 2,000 calorías. Como regla general:
- 5% o menos se considera bajo.
- 20% o más se considera alto.
5. Identifica los ingredientes principales
Los ingredientes se listan en orden de cantidad. Si los primeros son azúcar, grasas o sal, es probable que el producto no sea la opción más saludable. Busca productos con listas cortas y claras.
Con estos consejos, podrás elegir alimentos que se ajusten a tus objetivos de salud y bienestar. ¡Haz de la lectura de etiquetas un hábito saludable!
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
