Los bebés que nacen en primavera tienen un riesgo ligeramente mayor de desarrollar anorexia nerviosa, mientras que los nacidos en otoño tienen un menor riesgo, afirma un investigación.
La anorexia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria. Las personas con este trastorno pueden tener un miedo intenso a aumentar de peso, incluso cuando están con peso insuficiente. Es posible que hagan dietas o ejercicio en forma excesiva o que utilicen otros métodos para bajar de peso.
Este trastorno alimentario que lleva a que las personas pierdan más peso de lo que se considera saludable para su edad y estatura, es más frecuente entre los individuos que nacen en primavera, concretamente entre marzo y junio, según un estudio que publica la revista “British Journal of Psychiatry”.
El estudio de la Revista Británica de Psiquiatría, sugiere que tanto la temperatura, la luz solar, una infección o la dieta de la madre podrían ser responsables de este vínculo. Otros expertos afirman que el efecto es pequeño y el trastorno tiene muchas causas.
¿Cómo se realizó el estudio?
Los investigadores del Centro Wellcome Trust para la Genética Humana, analizaron datos de estudios publicados anteriormente en los que participaron 1.293 personas con anorexia.
Los científicos encontraron “un exceso de anorexia nerviosa” en los nacimientos ocurridos entre marzo y junio. “Por cada siete casos de anorexia que se esperarían, hubo en realidad ocho”, agregan. También encontraron menos casos del trastorno en los nacimientos ocurridos de septiembre a octubre.
Lahiru Handunnetthi y sus colegas del Centro de Genética Humana de la Universidad de Oxford sugieren que habría que identificar qué factores influyen en la predisposición a la enfermedad, posiblemente vinculados a la exposición al sol o a infecciones durante el embarazo, a la alimentación, o a los niveles de vitamina D de la madre mientras se desarrolla el feto.
Diversas causas
Según los investigadores, estudios previos sugerían que la prevalencia de enfermedades mentales como la esquizofrenia o el trastorno bipolar es mayor entre los nacidos en la «estación de las flores», por lo que no resulta sorprendente que la anorexia se añada a la lista.
Aunque no se conocen las causas claras de la enfermedad, se sabe que tiene una base psicológica que a menudo altera la forma como la persona evalúa y percibe su propia imagen corporal, los alimentos y la nutrición. Estudios previos también han mostrado que el trastorno tiene bases genéticas y fisiológicas.
“Sin embargo, nuestro estudio sólo ofrece evidencia de una asociación. Ahora necesitamos llevar a cabo más investigaciones para identificar qué factores están poniendo a la gente en un riesgo particular” agrega el científico.