El arroz es un alimento rico en carbohidratos, fácil de digerir y con bajo contenido en grasas. Además, posee vitaminas y minerales, al tiempo que controla ciertas afecciones —como la diarrea— debido a que contiene almidón y vitamina B, compuestos que restauran la flora intestinal.
Debido a su alto nivel en hidratos de carbono, se considera un alimento que favorece el aumento de peso; sin embargo, puede ser un producto muy saludable si se cocina de forma correcta, lo que permite reducir su contenido calórico.
Para empezar, es importante considerar que el arroz integral y el blanco no continen la misma cantidad de nutrientes. De acuerdo con el Departamento de Agricultura de E.U. (USDA, por su siglas en inglés), una porción de media taza de arroz integral cocido contiene 108 calorías; en tanto que el arroz blanco —misma cantidad— tiene aproximadamente la misma cantidad de energía, pero mayor contenido de fibra.
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Recomendaciones
A decir de Sudhair James, de la Escuela de Ciencias Químicas de Colombo, Sri Lanka, la mejor forma de preparar el arroz es añadiendo aceite de coco —3% del peso del arroz a cocinar— al agua hirviendo, antes de incorporar la semilla cruda. Posteriormente, debe dejarse enfriar y refrigerarse por 12 horas.
A decir del especialista, cuando el arroz se refrigera se convierte en un almidón resistente, es decir, tarda más en digerirse, pero no se convierte del todo en glucosa y aporta menos calorías; en comparación con el almidón digerible, el cual se procesa rápidamente, pero se convierte en glucosa, misma que termina siendo grasa.
En cuanto al aceite de coco, “interactúa con el almidón del arroz y cambia su estructura. (Es decir), enfriar el arroz después (de su cocción) favorece la transformación del almidón. El resultado es un plato más sano, aunque se vuelva a calentar”, indicó.
Recuerda, no es recomendable eliminar todos los carbohidratos de tu dieta, aunque busques perder peso. El arroz es un alimento sin grasas saturadas o trans, favorable para cuidar la salud del corazón. Si vas a consumirlo, procura no añadir grasa al cocinarlo. ¡Cuídate!
Vía: Hola Doctor
