No hay una dieta específica diseñada para personas con autismo. Sin embargo, hay quienes están explorando los cambios en la dieta como una forma de ayudar a minimizar los problemas de comportamiento e incrementar la calidad de vida en general.
Una base de la dieta del autismo es evitar los aditivos artificiales. Estos incluyen:
- Conservantes
- Colorantes
- Edulcorantes
Entonces, la dieta para los trastornos del espectro autista debe centrarse en alimentos enteros, como por ejemplo:
- Frutas y verduras frescas
- Aves de corral magras
- Pescado
- Grasas no saturadas
- Mucha agua
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Algunas personas también respaldan una dieta sin gluten para las personas con autismo. La proteína gluten se encuentra en los siguientes alimentos:
- Trigo
- Cebada
- Otros granos
Quienes defienden esta dieta creen que el gluten crea inflamación y reacciones corporales adversas en ciertas personas con autismo. Sin embargo, la investigación científica no es concluyente sobre la relación entre el autismo, el gluten y otra proteína conocida como caseína.
Algunos estudios y evidencia anecdótica sugieren que la dieta puede ayudar a mejorar los síntomas del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), una condición que posee ciertas similitudes con el autismo.
Fuente: Healthline
