La autoexploración mamaria es una herramienta fundamental para la detección temprana del cáncer de mama. Aunque no sustituye a los exámenes médicos como la mamografía, conocer tu cuerpo y estar atenta a cualquier cambio es clave para actuar a tiempo. Incorporar este hábito mensual en tu vida puede hacer una gran diferencia en la prevención o detección temprana de posibles problemas.
¿Cómo realizar la autoexploración mamaria?
Sigue estos pasos para hacer una autoexploración adecuada:
- Frente al espejo. Colócate de pie, frente a un espejo, con los brazos relajados a los lados. Observa cualquier cambio visible en el tamaño, la forma o la simetría de tus senos. Presta especial atención a alteraciones en la piel, como enrojecimiento, hoyuelos o engrosamientos, así como a cambios en los pezones, como secreciones o retracción.
- Con los brazos levantados. Levanta ambos brazos y colócalos detrás de la cabeza. Vuelve a observar tus senos en esta posición para detectar cualquier cambio que no fuera evidente antes.
- Con los brazos en la cadera. Presiona firmemente tus manos sobre las caderas, tensando los músculos pectorales. Busca cualquier irregularidad en el contorno de los senos o en la piel.
- Palpación tumbada. Acuéstate boca arriba y coloca una almohada bajo tu hombro derecho. Usa la mano izquierda para palpar suavemente el seno derecho con movimientos circulares. Comienza desde la parte exterior del seno y avanza hacia el centro, revisando toda la zona, incluyendo la axila. Repite el proceso en el seno izquierdo.
- Palpación en la ducha. Muchas mujeres prefieren hacer la autoexploración en la ducha, ya que el agua y el jabón facilitan el deslizamiento de los dedos sobre la piel. Usa movimientos circulares para palpar ambos senos y las axilas.
Conoce más: La importancia de la autoexploración de los senos durante la adolescencia
¿Qué buscar durante la autoexploración?
Durante la autoexploración, es importante estar atenta a cualquier signo inusual, como:
- Bultos o engrosamientos en el tejido mamario o la axila.
- Cambios en el tamaño, la forma o la apariencia de un seno.
- Hoyuelos, arrugas o protuberancias en la piel.
- Secreciones inusuales del pezón.
- Retracción del pezón o cambios en su forma.
- Enrojecimiento, sarpullido o descamación en la piel del seno o el pezón.
¿Cuándo realizar la autoexploración mamaria?
La mejor época para hacerte una autoexploración es unos días después de tu periodo, ya que durante la menstruación los senos pueden estar más sensibles o hinchados. Si ya no tienes menstruación, elige un día fijo cada mes para hacerlo, de manera que no se te olvide.
¿Qué hacer si encuentras algo inusual?
Si detectas un bulto o cualquier otra anomalía durante tu autoexploración, no te alarmes de inmediato. La mayoría de las veces, estos cambios no son cancerosos y pueden deberse a otras causas, como quistes benignos o cambios hormonales.
Es fundamental que, ante cualquier duda, consultes a tu médico para una evaluación más detallada. Sólo un profesional podrá determinar si es necesario realizar pruebas adicionales.
Fuente: Mayo Clinic