El cáncer infantil es una enfermedad poco común, pero sigue siendo una de las principales causas de muerte en niños. Detectarlo a tiempo puede hacer una gran diferencia en el tratamiento y pronóstico.
Aunque los síntomas pueden parecerse a los de enfermedades comunes, es fundamental que los padres presten atención a cualquier señal inusual y consulten a un médico si tienen dudas.
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Síntomas más comunes
Los signos de cáncer en niños pueden variar según el tipo, pero algunas señales de alerta incluyen:
1. Fiebre persistente sin causa aparente
Una fiebre prolongada, sin signos de infección, puede ser un indicador de leucemia u otros tipos de cáncer.
2. Moretones y sangrados sin motivo
Si un niño presenta moretones con facilidad, sangrados frecuentes por la nariz o encías, o pequeñas manchas rojas en la piel, puede ser señal de problemas en la sangre.
3. Dolores de cabeza intensos y vómitos matutinos
Estos síntomas pueden estar relacionados con tumores cerebrales, especialmente si empeoran con el tiempo.
4. Pérdida de peso y fatiga extrema
Una disminución repentina de peso sin cambios en la alimentación o el nivel de actividad debe ser evaluada por un médico.
5. Bultos o inflamaciones anormales
La presencia de masas en el abdomen, cuello, axilas o ingles puede ser una señal de alerta.
6. Dolor óseo o en las articulaciones
Si un niño se queja frecuentemente de dolor en huesos o articulaciones sin haber sufrido golpes o lesiones, podría estar relacionado con leucemia u otros tipos de cáncer.
7. Pérdida de visión o cambios en los ojos
Un reflejo blanquecino en la pupila, estrabismo repentino o cambios en la visión pueden ser síntomas de un tumor ocular llamado retinoblastoma.
Si bien estos síntomas no significan necesariamente que un niño tenga cáncer, es crucial que los padres estén atentos y consulten con un pediatra si notan cambios persistentes en la salud de sus hijos. La detección temprana puede mejorar significativamente el pronóstico y las posibilidades de tratamiento exitoso.
Fuente: Secretaría de Salud