Un pólipo sésil es una masa plana que surge de la capa mucosa de uno de los órganos huecos que se encuentran dentro del cuerpo. Estos pólipos crecen planos sobre el tejido que recubre el órgano y pueden mezclarse con él. Su falta de visibilidad puede hacer que para los médicos sea difícil encontrarlos y tratarlos.
Los pólipos sésiles suelen ser precancerosos, lo que significa que es posible desarrollar cáncer a partir de ellos, pero también pueden ser benignos o totalmente cancerosos. Los médicos pueden descubrirlos durante una colonoscopia y, con frecuencia, los extirpan para prevenir el riesgo de que se desarrolle cáncer.
Conoce más: Pólipos en la vesícula biliar, ¿qué son y cuáles son causas y síntomas?
Sumado a ello, los pólipos pueden tener pedúnculos. En lugar de formar una cúpula plana, como ocurre con los pólipos sésiles, los pólipos pedunculados se extienden a manera de tallos. Esta estructura otorga a los pólipos pedunculados una apariencia de hongo.
Los tipos comunes de pólipos sésiles incluyen los siguientes:
- Hiperplásico
- Sésil dentado
- Tubular
- Tubulovelloso
Cada una de estas cuatro categorías tiene el potencial de convertirse en cáncer colorrectal, pero esto es más probable en los casos de pólipos serrados sésiles.
Fuente: Medical News Today
