La sal es el condimento favorito de muchas personas. No obstante, su abuso ha sido relacionado con algunos efectos negativos para la salud. Uno de ellos es el riesgo de desarrollar hipertensión y, en el caso de ya padecer esta condición, empeorarla.
“Las personas que comen demasiada sal son más propensas a tener una hipertensión sin controlar, y podrían sufrir complicaciones como disfunción del corazón y los riñones; ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares”, señaló el doctor Sameer Bansilal, profesor asistente de medicina en la Escuela de Medicina Icahn de Mount Sinai, en la ciudad de Nueva York.
“De verdad hay que vigilar la sal en la dieta, sobre todo si uno tiene hipertensión”, subrayó el especialista.
De acuerdo con el doctor Bansilal, aunque el sodio (principal componente de la sal) es un nutriente esencial, consumirlo en exceso puede provocar que el agua en nuestro cuerpo se acumule, aumentando la presión arterial, haciendo que el corazón y los vasos sanguíneos se esfuercen.
El consumo promedio de sal al día, según la Asociación Americana del Corazón, debe ser de 1,500 mg. Una cucharadita de sal de mesa contiene unos 2,300 mg de sodio, por lo que nuestro consumo diario debe ser menor al de una cucharadita.
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Esto no significa que debamos desaparecer el salero de nuestra mesa, pues “más del 75% de la sal que comemos proviene de los alimentos empaquetados y preparados. Solo de un 15 a un 20% proviene del salero”, expuso Samantha Heller, nutricionista clínica principal del Centro Médico Langone de la NYU, en la ciudad de Nueva York.
Lo que debemos hacer, señala Samantha, es cuidar nuestro consumo de alimentos ricos en sodio que se encuentran en las comidas compradas en tiendas y preparadas, como sopas, pizza, panes y salsas.
“Como algunos de esos compuestos se añaden a los alimentos para la duración y textura, así como conservante o potenciador del sabor, el alimento quizá no tenga un sabor salado. Eso no significa que el contenido de sal no sea alto”, indicó.
Si acostumbras cocinar tu propia comida, limita el uso de sal a sólo la necesaria. Y, si prefieres comprar alimento preparados, pon mucha atención en su contenido de sodio. Tomando estas precauciones no tendrás problema alguno con el consumo de este condimento.
Vía: Health Library