A la mayoría de las personas les gusta la pasta, el pan blanco, los dulces azucarados y los productos horneados, alimentos ricos en carbohidratos y azúcares «refinados». Pero, ¿jugarán un papel en mantener a las personas despiertas por la noche? Pues un nuevo estudio publicado en la revista American Journal of Clinical Nutrition descubrió que las dietas ricas en carbohidratos sí podrían tener parte de la culpa.
El trabajo analizó las fluctuaciones en el azúcar en sangre relacionadas con la dieta, así lo informó el autor principal James Gangwisch, profesor asistente de trabajo social clínico y psiquiátrico en la Universidad de Columbia, en Nueva York (Estados Unidos).
Los «azúcares altamente refinados», que incluyen azúcares agregados, refrescos, arroz blanco y harina de trigo refinada, tienen lo que se conoce como un índice glucémico alto, el cual puede desencadenar un aumento repentino del azúcar en sangre.
«Cuando la glucosa (azúcar) sanguínea aumenta rápidamente, tu cuerpo reacciona liberando insulina, y la caída resultante en el azúcar en sangre puede conducir a la liberación de hormonas como adrenalina y cortisol, que pueden interferir con el sueño», explicó Gangwisch.
Lo que logró demostrar la investigación
La investigación evaluó a 50,000 mujeres mayores que llenaron «diarios» de alimentos como parte de un estudio a gran escala denominado Women’s Health Initiative.
Aunque el trabajo no pudo probar una relación de causa y efecto, sí encontró que las mujeres posmenopáusicas que comían muchos carbohidratos refinados, especialmente azúcares agregados, tenían una mayor probabilidad de sufrir insomnio.
También halló que, cuanto mayor sea el índice glucémico dietético de la mujer (que mide la cantidad de azúcar en los alimentos), mayor será su riesgo de insomnio. Esto fue particularmente cierto cuando las dietas incluyeron azúcares agregados y granos procesados, indicaron los autores.
Conoce más: Dieta mediterránea, ideal para combatir la desnutrición
Por otro lado, una dieta rica en verduras, fibra y fruta entera se relacionó con menos problemas de insomnio y con un mejor sueño, mostraron los resultados.
Las frutas enteras contienen azúcar, pero la fibra en ellas previene que ocurran picos en el azúcar en sangre, aseguró Gangwisch. «Esto sugiere que los culpables en la dieta que provocaron el insomnio de las mujeres fueron los alimentos altamente procesados, los cuales contienen grandes cantidades de azúcares refinados que no se encuentran naturalmente en los alimentos».
Pese a que la investigación se centró en mujeres mayores, sus hallazgos podrían extrapolarse a los hombres y a personas de todos los grupos de edad, señalaron los autores.
Recomendaciones
Por su parte, el doctor Gerald Bernstein, investigador en el Instituto de Diabetes Friedman del Hospital Lenox Hill, en Nueva York, quien no participó en el estudio, aconsejó lo siguiente con base en la información antes mencionada:
«Dado el efecto pernicioso de la falta de sueño, ajustar la dieta sería beneficioso para mejorar el sueño y reducir el insomnio».
Asimismo, la doctora Rifka Schulman-Rosenbaum, quien dirige el área de diabetes para pacientes hospitalizados en el Centro Médico Judío de Long Island,también en Nueva York, dijo que el nuevo estudio «hace hincapié en otro beneficio potencial de llevar una dieta saludable, más allá de los beneficios más conocidos, como la pérdida de peso o mejorar los niveles de glucosa».
Si tienes más dudas sobre cómo afecta el consumo de carbohidratos puede afectar tu sueño y tu salud en general, consulta a un especialista en nutrición.
Vía: Health Day News